Skip to main content
Category

Blogs de autor

Blogs de autor

Vargas Llosa en Fránkfurt

Mario Vargas Llosa en Nueva York Manuel Rodríguez Rivero escribe para ?Babelia? de El País una semblanza de cómo fue recibido el Premio Nobel a Vargas Llosa en Fránkfurt. Dice:

Lo mejor de la Buchmesse es que exista. Fráncfort continúa sin rival en el calendario anual del mercado internacional del libro (la Book Fair de Londres, que todavía se está recuperando del desastre de la nube tóxica, no le llega a la suela del zapato). Además, este año lo de Vargas Llosa ha sido una alegría. Insisto: desde el concedido a Günter Grass (1999), no recuerdo un Nobel recibido con más entusiasmo por la comunidad de los feriantes. El maestro Vargas es el más universal de los novelistas hispánicos vivos. Resulta grande incluso cuando afloja. Como decía Javier Cercas en este mismo periódico: ?Cuando parece que no está en plena forma, está más en forma que la inmensa mayoría de los novelistas cuando están en plena forma?. Y desde muy jovencito: como Orson Welles (Ciudadano Kane), Stanley Donen (Cantando bajo la lluvia), Thomas Mann (Los Buddenbrook) o Carson McCullers (El corazón es un cazador solitario), Vargas Llosa terminó su primera obra maestra bastante antes de cumplir treinta. Y desde entonces no ha parado de regalarnos historias y personajes. Y de reflexionar lúcidamente acerca de su oficio y de los libros de los otros. Estos días, y antes del premio, en Fráncfort también se habló de su inteligentísima agente, Carmen Balcells, que de nuevo ha conseguido una página de publicidad gratuita en un periódico de gran tirada (¿recuerdan la entrevista que concedió a La Vanguardia en abril?: yo la tengo fijada con tachuelas a la pared, al lado de una foto de Einstein). Esta mujer es un genio: hace lo que se le antoja con los medios y con los editores. Pero, hay que reconocerlo, cuida y ama a (algunos de) sus autores. Ahora, con esto del premio a Vargas, una vez más le ha venido a ver Dios (en su avatar de Alfred Nobel).

Leer más
profile avatar
21 de octubre de 2010
Blogs de autor

La tijera y la espada

La gran tijera se abate también sobre los ejércitos. Nadie entendería que los mayores recortes del último medio siglo no alcanzaran al gasto militar. La poda del gasto público es la respuesta inmediata a las exigencias de los mercados, pero sus efectos se proyectan en el largo plazo. Esta crisis económica enorme que zarandea a Europa y América es un momento de adaptación convulsa a un mundo naciente, que no se resuelve apretándose el cinturón durante una temporada ni con pequeños retoques, sino transformando radicalmente sistemas sanitarios y educativos, empresas e instituciones, las Administraciones públicas y el entero Estado de bienestar europeo. Y de forma destacada esos artefactos de gran coste y creciente complejidad organizativa y tecnológica que son los ejércitos y los sistemas de defensa.

Puede discutirse la profundidad y oportunidad del recorte respecto a la recuperación del crecimiento y del empleo, cuestión que enfrenta a dos grandes escuelas, quienes creen como Barack Obama que hay que seguir estimulando las economías mediante inversión pública, y quienes como los europeos en general, pero especialmente el Gobierno alemán y el Banco Central, consideran que lo primero y esencial es quitar toda la grasa que haga falta hasta recuperar la esbeltez para crecer. Distinta es la discusión desde el punto de vista del recorte estratégico, que afecta a las estructuras y al largo plazo. ¿Hasta dónde cabe recortar el sistema de ayudas sociales sin lesionar a los más desfavorecidos ni afectar a la igualdad y la solidaridad? ¿Hasta dónde se puede limitar el gasto militar sin afectar a la seguridad? Antes de responder a estas preguntas hay todavía un trecho previo a recorrer. Hay tareas pendientes que no se abordaron a tiempo y que se deberán acometer ahora dolorosamente y sin rechistar. Vale para el sistema de pensiones, cuyo futuro había sido detectado por los demógrafos desde hace decenios, pero también para los ejércitos europeos y la defensa conjunta de Europa. Durante demasiado tiempo se han mantenido sistemas de defensa obsoletos, pensados para invasiones terrestres que ya no se van a producir o disuadir a un enemigo simétrico que no existe. Han cambiado los peligros, y por tanto las prioridades, y lo mismo ha sucedido con la dimensión de las amenazas. Hay que recortar para dar una señal clara a los mercados, pero también porque no se puede soportar el gasto militar de 27 países, cada uno por su cuenta, según unos esquemas irracionales y obsoletos. La OTAN está discutiendo su nuevo concepto estratégico, que debe proporcionar parte de este marco conceptual sobre nuevos peligros y amenazas. Y a la vez está aplicándose el cuento: también correrá la tijera, que hará disminuir las estructuras, agencias y comités de la Alianza. El escudo antimisiles que se quiere aprobar en la próxima cumbre de Lisboa, a pesar de su coste de 200 millones de euros, podría ser un buen instrumento para el ahorro si significara el desmantelamiento de las armas nucleares tácticas desplegadas todavía en Europa. Lo piden varios socios, pero Francia se opone porque el desarme nuclear en Europa pone en cuestión su pequeño arsenal y con él su idea de una soberanía nacional a la que no quiere renunciar ni quiere compartir. La reducción de los arsenales, iniciada suavemente por Obama con la revisión del tratado de reducción de misiles estratégicos (START) con Rusia, sería el mejor de los recortes. Pero se entienden las resistencias en el mismo momento en que los países emergentes empiezan una lenta, pero bien clara, escalada en su gasto militar. Los europeos solo podemos recortar de verdad si nos dotamos de una buena defensa común y garantizamos junto a Estados Unidos que ninguna potencia emergente o algún Estado gamberro podrá amenazarnos en el futuro. Una buena relación con Rusia, fundamento de cualquier política de desarme en el continente, sería también un buen camino para el ahorro. Pero la vía más práctica e inmediata es la cooperación y coordinación europeas. Bastaría con que Francia, Reino Unido y Alemania pusieran sus ejércitos, sus industrias militares y sus recursos en común para que la defensa europea empezara a existir. Un paso así incrementaría la seguridad de todos, daría un gran protagonismo a Europa en la seguridad global y, en asociación con Estados Unidos, sería un estabilizador mundial formidable. Estamos muy lejos políticamente, pero el recorte que exigen nuestras economías convierten este objetivo utópico en una necesidad perentoria.

Leer más
profile avatar
21 de octubre de 2010
Blogs de autor

Haz y envés

La presencia y la ausencia no pueden concebirse como el haz y el envés de algo, sea social o natural. No hay esta doble cara a la que la mente se dirige alternativamente y excluyendo el término abandonado. Así como no hay presencia absoluta del otro, objeto o sujeto, no hay ausencia completa, ni siquiera tras la muerte. Por muy pura y efectiva que sea.

Leer más
profile avatar
21 de octubre de 2010
Blogs de autor

Terapia ocupacional

Unos hacen figuritas de papel, otros unen cuentas de colores en un collar que nunca se termina o pegan trocitos de tela en una sobrecama infinita. Terapia ocupacional le llaman: mantener las manos trabajando para que la mente no se desboque, diría yo. De vez en cuando, una de esas repetitivas ocupaciones logra sacarme de la cotidianidad aunque no la haga con agujas o pegamento, sino auxiliándome de destornilladores y pinzas de corte. Me da por desarmar circuitos, recomponer cables, abrir todo tipo de elementos electrodomésticos a ver si su diagrama de funcionamiento tiene más lógica que nuestra absurda realidad. Hago y rehago la tecnología. Quizás un día logre crear ese artilugio que no sólo relaje tensiones, sino que sirva ?finalmente? para conectarnos a Internet.

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Blogs de autor

"El error" de César Aira

César Aira César Aira dice que no corrige, que cuando sale un error lo deja ahí, lo deja estar. Difícil creerlo. Pero al menos con esa idea ha hecho una novela titulada, justamente, El error y que ha presentado en España. Dice la nota en Ñ:

César Aira ansía la libertad de los artistas contemporáneos que pueden cambiar de formato con facilidad y por ello se decanta por una escritura ?imprevisible? que se ha convertido en el sello de identidad del autor argentino, como una vez más pone de relieve en su nueva novela, ?El error?. Y así convencido de que ?ser previsible es lo peor que le puede pasar a un escritor?, Aira, uno de los escritores argentinos más prolíficos, avanza en su carrera literaria sin volver la mirada atrás y presenta en España su última obra, que llegará a América en los próximos meses.Al buscar la génesis de esta novela, el escritor explica que ?El error?, al que el narrador se asoma desde la puerta de un ataúd que adorna la portada del libro, tiene que ver con su ?técnica de escribir?. ?Si cometo un error, si una página me sale mal, nada de cambiarla sigo adelante y no la corrijo. A veces siguiendo adelante los errores se capitalizan y dejan de ser errores?, indica Aira (Coronel Pringles, 1949). Y esta técnica, justifica el autor de más de una treintena de novelas, además de un buen número de traducciones, ensayos y cuentos, es lo que le da ese aire ?un poco inesperado y sinuoso a lo que escribo?.?El error?, basada en una experiencia real del autor, comienza con la visita de una pareja, con disputas cotidianas, a un jardín de un país exótico en el que se ubica un pabellón de esculturas. A partir de este escenario las historias se encadenan hasta darse la mano un bandolero -protagonista de una saga literaria que causa furor entre las mujeres de una prisión- con una mujer que huye tras creer haber asesinado a su marido y que a punto ha estado de librarse de la cadena perpetua. Sin olvidar, el rol protagonista de la azarosa vida de un escultor que lo perdió todo. Y es que el arte es para César Aira una gran fuente de ?sugerencias e inspiración?, sobre todo las nuevas corrientes de arte contemporáneo, pese a que se confiesa un devoto de Velázquez y de ?Las Meninas? por lo ?extraño y ?enigmático? del cuadro. ?Vistas desde una mirada hostil estas corrientes (contemporáneas) pueden parecer extravagantes y provocativas, pero también tienen esa libertad de creación que a veces no falta a los escritores?, asegura César Aira. (?)Se decanta por la novela corta, por ser el género que le ofrece más libertad y por su ?laxitud?, porque, explica, a diferencia del poema o el cuento ?no tiene una exigencia de calidad tan alta?. El propio autor se inscribe en la corriente surrealista que aún se mantenía viva en Argentina en los años sesenta y pese a que Córtazar fue ?un gran amor de juventud? considera sus maestros a Borges, Machado de Assis o César Vallejo.César Aira, que ya prepara un nuevo trabajo sobre los indios de Argentina, aprovecha su visita a España para participar en el seminario que sobre arte contemporáneo y literatura se inaugurará mañana en la Casa Encendida de Madrid, donde intervendrá en su jornada de apertura. En cualquier caso, su pasión por el arte se queda sólo en ?afición y en divertimiento?, al considerar que tanto en la literatura como en la plástica o la escultura hay que ?jugarse todo?, de lo contrario ?no cala?, concluye. 

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Blogs de autor

La máquina del oro

En medio de noticias más o menos serias, ha habido dos ocurrencias que resumen  nuestro extraño mundo: la instalación en Madrid de una máquina callejera que, en lugar de coca-colas, vende oro en distintos tamaños, y la elección por parte de la ONU de la astrofísica malaya Mazlan Othman como embajadora ante posibles visitantes extraterrestres. ¿A quién se le ocurrió esta genial idea? Encaja de maravilla con los tiempos incompresibles que vivimos porque lo único que nos faltaría es tener que hacer frente a una avalancha de alienígenas. O quizá sería la solución, algo tan impresionante como conocer seres de otros mundos debería hacernos sentar la cabeza, pensar un poco, ser más considerados y menos arrogantes. Así que el hecho de contemplar tal posibilidad ya es una manera de aceptar que no somos los reyes del mambo del universo. Y que si hay intercesores entre los hombres y Dios con todo un protocolo, rituales, ceremonias y mucho poderío económico y moral, ¿por qué no organizar una modesta representación ante unos seres más probables que los dioses?, sobre todo si como sospecha el mismísimo Stephen Hawking son criaturas difíciles de tratar. Una extraordinaria responsabilidad para la doctora Othman que no tendrá que cumplir porque lamentablemente este poético nombramiento ha sido desmentido. Un relevante personaje de Naciones Unidas lo ha tachado de absurdo. Como si no existieran nombramientos absurdos a puñados, puestos fantasmales que no sirven para nada, mientras que, cargos que nos hagan soñar y pensar más allá de nosotros mismos no hay ninguno.

            Ni que este planeta se rigiera por la suma racionalidad, y ni que nuestros actos estuviesen regulados por la ciencia. No hace falta hablar de atolondramiento y visceralidad, ya sabemos de qué pie cojeamos. Seguramente a Hawking le preocupa que los aliens sean como nosotros.

            Cuando esta hermosa noticia se desvaneció apareció otra, también sorprendente aunque real y más terrenal y que podría ser registrada por Google Earth: Madrid, Hotel Palace, recepción del hotel, máquina dorada.

            Frente a la metáfora de nosotros y el espacio exterior, ésta otra de nosotros y el espacio interior: la máquina expendedora de oro que se ha instalado en el Hotel Palace y que se ha convertido en una atracción. Por 40 euros puedes hacerte con un gramo de oro. Hasta ahora estas máquinas básicamente servían botellas de agua, refrescos, tentempiés envasados, condones y cajetillas de tabaco, en general nada serio, nada perdurable. Estaban asociadas a la calderilla y no a pulseras de brillantes o pendientes de esmeraldas. Pero entonces llega alguien que mira lo de todos los días de otra manera y se le ocurre meter en lugar de tabletas de chocolate lingotes de oro en un momento en que este metal está por las nubes. No sabemos si prosperará, pero de momento la gente se hace fotos junto a la máquina y decide regalarle a su novia o novio una pepita, que no sale despedida a la brava sino empaquetada y con su recibo correspondiente. Y, además, así el adicto no tiene que esperar a que abran las joyerías, hay mucho enganchado al metal amarillo, desde el que tiene que ahorrar para comprarse unas cuantas cadenas al destinatario de anuncios que ofrecen ordenadores portátiles hechos de oro con diamantes, acompañado de su correspondiente ratón “forjado en oro con 59 brillantes”. Por supuesto el pendrive va haciendo juego en oro con pavés de diamantes. Y no puede faltar el móvil del mismo sesgo. ¿Y si tenemos un móvil así y nos lo olvidamos en un bar? No es extraño que los carteles de la Puerta del Sol de “Compro oro” cada vez sean más grandes.

Y aunque ahora el oro haya perdido su carácter divino, para algunos sigue significando suerte, y desde luego con él siguen apuntalándose las economías del mundo. La nuestra está en lingotes en el Banco de España. Puede que su magia consista en que se puede comparar con el sol. Ha sido el delirio de los alquimistas, y la humanidad siempre ha corrido tras su brillo. Jasón se embarcó en una aventura increíble para encontrar el vellocino de oro y Zeus se convirtió en lluvia de oro para fecundar a Dánae, que estaba recluida en una habitación. Y en realidad el oro no tiene demasiada utilidad. Toda su grandeza se la damos nosotros al desearlo tanto. Y lo deseamos por ser raro y escaso y porque nos sirve para parecer poderosos.      

Como advertencia, siempre tendremos el relato del rey Midas, ese hombre tan ambicioso que le pidió a un dios que todo lo que tocara se convirtiese en oro. El dios le preguntó si estaba seguro de lo que pedía y él contestó que sí. No contaba con que una manzana y un trozo de pan de oro brillan mucho, pero están algo duros.

 

           

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Blogs de autor

III. La geografía, medida de todas las cosas

En su siguiente novela La casa verde (1966), Vargas Llosa regresa al territorio tradicional de los escritores latinoamericanos de la primera mitad del siglo, que definieron la escritura por espacios geográficas, como si la novela, hija de la naturaleza, fuera la geografía misma, la pampa, la cordillera, la selva, el desierto, los ríos caudalosos sin medida que no se sabe nunca donde nacen. La casa verde se construye en dos de esos territorios, el desierto y la selva, del poblado de Piura en la costa norte peruana a Santa María de Nieva en la selva amazónica, y no falta el río infinito por el que el bandido Fushía, el japonés más famoso del Perú antes de que lo fuera Fujimori, navega hacia su muerte enfermo de lepra.

Igual que en La ciudad y los perros, la novedad está en la manera en que se cuenta, en el lenguaje, en la tesitura de los diálogos que entrelazan historias que corresponden a tiempos distintos. El procedimiento crea el misterio. Y la naturaleza será siempre personaje como antes, pero la desafían los otros personajes de carne hueso, militares licenciosos de bajo rango, prostitutas, contrabandistas y aventureros, como en La Vorágine de José Eustasio Rivera, de tantos años atrás. Una herencia transformada.

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Blogs de autor

Sombras del espíritu

En ese lugar de Praga al que me refería en el texto anterior, en esa casa evocadora  de quien simboliza  el amor a la minoritaria  lengua alemana y  la condición judía, la vitrina sobre el "círculo de los filósofos" a la que aludía acentúa la atmósfera de universo perdido. Pues  no sólo los protagonistas han desaparecido, sino que lo ha hecho también el espíritu que  animaba la casa misma de Berta Fanta, ha desaparecido simplemente  ese "circulo de los filósofos". Desaparecido de Praga y desaparecido de cualquier otra ciudad. ¿Pues como imaginar hoy un lugar dónde el espíritu se halle a la vez inquieto por la descripción hegeliana  del proceso que va desde la percepción inmediata a la conciencia reflexiva,   la explicitación por Kant de las condiciones de posibilidad de la experiencia, la lucha por alcanzar- a través de la matemática- un concepto propio para la infinitud, la voluntad   freudiana  de mirar, sondear y descender (provisto de las exclusivas armas de la razón) a  ese  abismo que es el universo de los sueños, la reducción por Einstein de Tiempo y Espacio (que el propio Kant había pretendido apuntalar como incondicionales o absolutos)a meros prejuicios, y finalmente la subversión por la Mecánica Cuántica de algunos de los postulados del pensar a los que el propio Einstein no estaba dispuesto a renunciar?

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Blogs de autor

Arquitecturas de ausencia

La arquitectura posee una doble naturaleza. De un lado todo cuanto se construye crea una realidad que no existía previamente y con ello aumente la masa  presencial del mundo.  Pero, de otro lado, no pocas clases de arquitectura son arquitecturas relativas a la ausencia. Arquitectura que evocan algo desaparecido, tal como es el caso de los mausoleos o el ejemplo de los monumentos que incluso, en ocasiones, tratan de recordar una batalla y a sus legiones de hombres, objetos, ideas y arquitecturas desaparecidas. Ciudades físicas y culturales que pasaron al mundo de la ausencia y hacia cuyo paraje el monumento se adentra con el propósito de  extraer y enaltecer su impalpable y evaporable memoria.

Con todo, por encima de las diferentes arquitecturas relacionadas con la ausencia, la mayor de todas ellas es la arquitectura de los templos dedicados a una o varias divinidades. A divinidades nunca vistas, nunca presenciadas y sobre las  que, sin embargo, se realiza el calambur de admitirla presente y ausente en el termómetro de la fe. La arquitectura se erige en fin no tanto para recordar su presencia como para construirla y esto a pesar de que su presencia omnímoda y sagrada se tiene por el asidero fuerte  al que acogerse, la presencia invisible y salvadora, la presencia consoladora y salvadora, la presencia polifuncional que, sin embargo, el  monumento se propone fijar como si su cuerpo no existiera y se  hallara ausente, no presente. Como si su cuerpo fuera evanescencia y su recuerdo una falacia nacida de la necesidad y el desamparo, la desolación o la misma ausencia.

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Blogs de autor

Diez principios para unas negociaciones de paz

Las memorias de Tony Blair, publicadas bajo el título de ?A journey? (Un viaje), han tenido una recepción crítica dividida, yo diría incluso más negativa que positiva. Para mi gusto, las críticas acerbas que ha recibido se deben más al personaje que al libro, cuyo interés y actualidad me parece innegable, sobre todo los capítulos que afectan a los momentos más cruciales de su vida política. Tengo el propósito de escribir en algún momento sobre el conjunto de las memorias, pero hoy quisiera mencionar aquí únicamente los diez puntos que Blair considera como fundamentales para la resolución de un conflicto como el de Irlanda del Norte, que el ex primer ministro aplica también a Oriente Próximo y cualquier lector puede trasladar a dónde le plazca. ¿Valdrán por ejemplo para el País Vasco?

1.- ?En el corazón de la resolución de cualquier conflicto debe haber un marco basado en unos principios acordados?, empieza diciendo Blair. En este punto se pregunta por la naturaleza del conflicto, los objetivos que se quieren conseguir y cuál es el meollo del problema. Su idea es que hay que obtener la paz dejando abierto el problema central que no podemos resolver, que en el caso de Irlanda del Norte es la disyuntiva entre permanecer unida a Londres o incorporarse a una Irlanda unificada. Esto sólo puede obtenerse por el principio del consentimiento de las dos partes, que en el caso de los republicanos condujo a ofrecer la paz a cambio de la igualdad y del poder compartido. 2.- Hay que amarrar y centrar los problemas, de forma continua, incansable e implacable. La entrega de las armas del IRA es el ejemplo que pone Blair para explicar esta actitud, mientras que las discontinuidades y la debilidad en esta atención continua es lo que falla según su parecer en Oriente Próximo. 3.- Atender a los detalles y las cosas pequeñas que a veces pueden tener un gran significado para una de las partes. Se trata de lo que es importante para los otros aunque no lo sea para uno mismo. El ejemplo en este caso es el desmantelamiento de las torres de vigilancia militar británicas, convertidas para los católicos en el símbolo de la ocupación y para el ejército británico en instrumento fundamental para evitar atentados. 4.- Blair no atiende a las ironías contra las ?soluciones imaginativas? y reivindica la creatividad: ?Usar cosas grandes o pequeñas, en solitario o combinadas y si es preciso inventar algunas más para desbloquear el proceso?. Ahí evoca un caso famoso como el de la forma de la mesa en la que debían encontrarse cara a cara el líder republicano Gerry Adams y el unionista Ian Paisley. Los partidarios de este último querían que los dos dirigentes se encontraran uno frente al otro, escenificando el enfrentamiento, mientras que al Sinn Fein le convenía que aparecieran uno al lado de otro como eventuales socios. La solución que satisfizo a todos la proporcionó una mesa en forma de diamante en la que estaban uno al lado del otro y también uno frente al otro. 5.- El conflicto no se resolverá si se deja que las partes lo hagan ellas solas. El tercero que ejerce como mediador ?actúa como tampón, mensajero y de forma crucial como persuasor sobre la buena fe en un clima dominado normalmente por la desconfianza?. Blair habla de su propio papel, sobre todo para pasar de la fase que denomina de ?ambigüedad creativa? a la fase de los ?actos de finalización?, que consisten en demostrar ?que el pasado ha quedado detrás nuestro?. 6.- Este es un punto lleno de observaciones prácticas. ?Hay que darse cuenta de que para las dos partes la resolución del conflicto es un viaje, un proceso, no un acontecimiento. Cada parte toma su tiempo en dejar el pasado detrás suyo. Un conflicto no es únicamente un desacuerdo caracterizado por la violencia. Tiene una historia y crea una cultura, con tradiciones, rituales y doctrina?. ?Las dos partes raramente ven el dolor de los otros?. ?La paz debe madurar, echar sus raíces para desplazar las raíces del conflicto?. 7.- Blair recuerda en este punto que todo proceso de paz tiene su interrupción, con frecuencia violenta, protagonizada por ?quienes creen que el conflicto debe continuar?. Advierte que ?hay que estar preparado para tal interrupción?. Y cita precisamente el atentado de Omagh, el 15 de agosto de 1998, en el que murieron 29 personas, dos de ellas jóvenes españoles, posterior a los Acuerdos de Viernes Santo. Ante estas interrupciones Blair asegura que caben dos posibilidades: la mala, que es rendirse y considerar que nunca será posible alcanzar la paz; y la buena, que es ?utilizar el horror como motivo para seguir adelante?. El ex premier británico recuerda que el Sinn Fein ?condenó los ataque de forma inequívoca? y da un buen consejo: ?Una vez has admitido que el terror tiene realmente la propiedad de las llaves del proceso, son ellos quien lo conducen. Mantén pues firmemente las llaves en las manos de quienes van a hacer la paz (peacemakers)?. 8.- ?Los líderes cuentan?. Que se lo digan a él, que utiliza casi todo el libro para demostrar e ilustrar esta tesis. Pero no le falta razón, al menos en el proceso irlandés. ?Todo proceso de paz apela a riesgos políticos, incluso al sentido de la aventura política y a un cierto coraje político, a veces incluso al coraje personal?. Este punto es de los mejores, porque contiene una brillante galería de retratos: Ian Pasley, John Hume, Gerry Adams y Martin McGuiness, entre otros. 9.- ?Las circunstancias exteriores deben militar a favor de la paz y no en contra?, asegura en el único punto objetivo de un decálogo lleno de psicología y subjetividad, a veces más próximo al manual de autoayuda para peacemakers que al análisis político. Es una evidencia, en todo caso, que el contexto inmediato e incluso geopolítico tiene una influencia decisiva en todo proceso de paz. 10.- Quizás el más subjetivo de todos los consejos: ?No rendirse nunca. Simple pero esencial: no dejar nunca de trabajar (en la paz) y no renunciar nunca (a la paz)?. Hay que decir que habla por experiencia, propia y de su predecesor, John Major. Uno de los datos definitivos que explica la paz en Irlanda es el consenso entre conservadores y laboristas, tanto cuando Major era premier como cuando lo era Blair, cuando el primero conducía conversaciones ?clandestinas? o cuando quien lo hacía era el segundo. ?Recuerda: es mejor intentar y fallar que no intentarlo nunca.?. Así termina el decálogo y poco después este brillante capítulo que celebra como Irlanda del Norte se ha convertido en un país normal, en el que ?gente que antes querían matarse unos a otros ahora quieren trabajar juntos?.

Leer más
profile avatar
20 de octubre de 2010
Close Menu
El Boomeran(g)
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.