Vicente Molina Foix
Yo acudía como invitado a un festival o más bien congreso cinematográfico en un gran hotel moderno de una ciudad desconocida, y llevaba de acompañante a un transexual o travesti: no se aclaraba su verdadera naturaleza porque en ningún momento del sueño copulábamos. Se trataba de una mujer rubia y alta, opulenta, de caderas anchas y femeninas pero ya no muy joven ni muy bien hecha, lo que era advertido de inmediato por mi madre, que hacía una breve aparición (un ‘cameo’ habría que llamarlo en este caso) para decir: "Esa chica tiene el culo como un pandero". Yo la llevaba conmigo a todas partes pero al mismo tiempo trataba de que ambos pasáramos desapercibidos, algo imposible, dadas las dimensiones del travesti (o transexual) y lo cerrado del ambiente en esa "rassegna del cinema" (así la designaba yo en una fase del sueño, trasladando la acción a Italia). La velada principal del congreso tenía lugar una noche y yo acudía con mi acompañante, que producía gran curiosidad entre los presentes; recuerdo al despertar como figura más vívida a Ana Belén, que reía irónicamente, pero sin malicia, en el momento en que yo, cansado de ser el centro de las atenciones visuales de los reunidos, me iba del salón principal del hotel con aquella novia o lo que fuera, para no provocar. A partir de esa velada se me hacía evidente que la situación no podía seguir así, y mi incomodidad aumentaba por el hecho de que cada vez que la miraba yo a ella en nuestra habitación (ya apenas salíamos a los actos fílmicos) comprobaba lo poco atractiva que era. De manera que en el avión que nos devolvía, tal vez antes de tiempo, a casa, yo tomaba la decisión secreta de romper con ella, y ella parecía advertirlo, pues cambiaba de actitud en el vuelo y dejaba de sonreír, poniéndose oscura. Desde la ventanilla de clase turista le señalaba entonces el lugar preciso de la ciudad donde la abandonaría al aterrizar, muy distante del que yo mismo iría a ocupar en solitario. La angustia (¿por la nueva soledad resultante?, ¿por la crueldad de mi gesto?) me despertaba.