Sergio Ramírez
La última vez que el presidente Daniel Ortega había concedido una entrevista de televisión fue cuando llegó a Managua con sus cámaras el periodista de la cadena Al Jazeera, Sir David Frost, célebre por su viejo mano a mano con el presidente Richard Nixon ya destronado y en retiro en California. Para la fecha de esa entrevista a comienzos del año 2009, acababa de aparecer la película de Ron Howard Frost/Nixon, y el entrevistador estaba de nuevo de moda. Fue cuando Ortega declaró que esperaba vivir cerca de cien años para continuar hasta entonces en el poder.
La entrevista sólo se transmitió en inglés, a través de un canal de gran influencia en los países árabes, pero de nula presencia en Estados Unidos y en América Latina. Ahora, Ortega ha concedido otra, muy larga, a la periodista Elena Rostova, para el programa A solas del canal internacional de Rusia, RT. En su atractiva lista de entrevistados, Elena tiene también a Román Karpujin, un agente de los servicios secretos soviéticos convertidos en bailarín y luego en torero, y al portero de la selección rusa de fútbol Rinat Dasayev.
En la presentación de la entrevista a Ortega, el canal oficial de la Federación Rusa realza el hecho de que fue su gobierno el primero en el mundo en reconocer como naciones independientes a Osetia del Sur y Abjasia, territorios separados de Georgia por la fuerza militar de Rusia, un gesto que el Kremlin no hecha en el olvido; en la selecta lista que encabeza Nicaragua sólo se encuentran la propia Rusia, claro está, Venezuela, Nauru (isla de Micronesia de 21 kilómetros cuadrados de superficie), y Transnistria, pequeño trozo segregado de Moldavia que no goza del reconocimiento de las Naciones Unidas.