Rafael Argullol
Rafael Argullol: Es para mí una experiencia interesante en cuanto a que es una nueva síntesis y en consecuencia ha sido un reto.
Delfín Agudelo: ¿Cómo definirías entonces un blog literario? ¿En qué crees que consiste? ¿Cuál es su utilidad, de llegar a tenerla?
R.A.: Yo imagino que actualmente puede haber tantas definiciones de blog como bloggers haya; y esto todavía es más evidente en algo que pretenda ser un blog literario. Por tanto admitiendo todas las otras concepciones, veo el blog literario siguiendo el ejemplo anterior, como la combinación de dos figuras: una es como el mensaje que pones en la botella y botas al mar, de manera que el destinatario era desconocido, incluso a través de los siglos; acompañado, sin embargo, de lo que antes llamaba el nerviosismo y la inmediatez de la nueva comunicación. Es un mensaje en la botella lanzado al mar pero lanzado a un mar en la cual hay una multitud de destinatarios que pueden acusar recepción de manera casi inmediata. Por tanto, por un lado te encuentras con una cierta exposición al desnudo o desprotección, y por otro lado sin embargo te encuentras con una gran compañía de signos y señales por parte del receptor. En ese sentido diríamos que un blog literario sería en cierto modo la literatura o escritura literaria que tú puedes poner en el interior de una botella, pero enviada a la velocidad del taquígrafo; o si se quiere, a la velocidad de la luz, y con destinatarios que pueden estar a mucha distancia en el espacio pero que en el tiempo pueden ser asombrosamente y provocadoramente inmediatos.