Skip to main content
Blogs de autor

Más listas

Por 6 de diciembre de 2009 Sin comentarios

Eder. Óleo de Irene Gracia

Julio Ortega

Mis vecinos de  Babelia preparan la madre de todas las listas, la lista de los mejores libros publicados este año en España.  Para contribuir con el espíritu deportivo de estas encuestas (ya he dicho que documentan la fugacidad), incluyo ahora la de dos interlocutores de esta bitácora, y sumo la mía. 

Heike Scharm, especialista en narrativa española contemporánea, y Samuel Andrés Arias,  crítico bien informado y blogero alerta,  demuestran la diversidad (una forma de la inteligencia crítica) de estas listas de buena voluntad.   Heike recomienda libros publicados en alemán, inglés y español; Andrés, libros de latinoamericanos, indistintamente de su lugar de impresión; yo, libros de españoles (publicados en España) y de latinoamericanos (publicados en cualquier parte).  No se por qué piensas tú, lector, que te excluyen estas listas, cuando la tuya es tan buena como cualquier otra.  Todo demuestra que es más difícil incluir que excluir. Parece, en efecto, más fácil no incluir los libros publicados en América Latina pero, en verdad, es más complicado: el lector no se debe al lugar de impresión, y la lectura se ha hecho ilimitada gracias a Internet.

Cualquier lector puede adquirir cualquier libro en cualquier librería virtual.  Y puede, si es avisado, consultar en red (hay excelentes portales literarios) las reseñas de un libro publicado en Buenos Aires, Santiago, Lima, La Paz, Bogotá, Caracas, Quito, Centro América, México; para no hablar ya de la producción editorial en las ciudades del libro que hay dentro de cada país hispano, representada por ese gran espacio de cultura democrática que son las Ferias del Libro, donde van a dar todos los libros, los de las más grandes y más pequeñas editoriales, sin país de origen, postulando que el español es universal. Si el lector es sensible al destino del español en este mundo, tampoco dejará de lado los libros publicados, en su lengua, en Estados Unidos. 

Incluir es apostar por la concurrencia de la lectura; esto es, por un lector mejor educado.

Que tus lecturas sean mejores que las mías.

 

 

Heike Scharm

 

Herta Müller. Preferiría no haberme encontrado conmigo misma hoy (Heute wäre ich mir lieber nicht begegnet), Hamburg: Rohwolt Verlag, 1997. Traducción al castellano pendiente.

Sabido es que los premios de literatura cumplen la función de máquinas de promoción, y que no son necesariamente reflejo de la calidad literaria de una obra. Me alegra ver, sin embargo, que el premio Nobel de este año reivindica una obra de alta calidad, casi desconocida a nivel mundial y muy poco traducida. Hasta ahora, sólo cuatro de las diecinueve novelas de la escritora rumano-alemana han sido traducidas al castellano. Plena de imágenes kafkianas, su escritura, a la que resisto reducir a "feminista" o "femenina," vacila entre los ámbitos de la poesía, el pensamiento y la narración, sin nunca caer en una sabiduría tipo calendario, como le pasa a tantos escritores que intentan hacer pensamiento con la literatura. Siempre inesperadas, las observaciones y reflexiones, narradas con palabras simples pero exactas, convierten la lectura de esta novela en placer y estímulo continuo.

Más allá del interés que pueda despertar una escritora que vivió y escribió durante 34 años bajo una dictadura (da la casualidad que son los mismos años del franquismo), la novela trasciende su contexto político-histórico ya que al dejar que el ambiente de la opresión totalitaria invada la vida cotidiana e íntima, logra comunicar su experiencia a cualquier lector. El inicio de la novela evoca el ambiente sofocador del Proceso de Kafka: "Me han citado. El jueves a las diez en punto. […] Desde las tres de la madrugada he escuchado el sonido rítmico del despertador: citado, citado, citado". Más tarde aprendemos que la narradora está sujeta a interrogatorios frecuentes por su intento fallido de escapar. La novela es un largo monólogo interior la mañana en que sale hacia el interrogatorio y, más tarde, de regreso a casa. Profunda, por carecer de cualquier pretensión de profundidad, Herta Müller captura en las banalidades, objetos, recuerdos y observaciones de cada día, el terror y la lucha de vivir bajo una dictadura. Evitando cualquier tono melodramático, lo narra con una voz ligera, entre vulgar y poética, burlona más que desconsolada, absurda y familiar como el aroma a "licor, café, cigarrillos, desinfectantes y polvo de verano" que  se desprende de sus páginas.  

Antoni Tàpies. En blanco y negro. (1955-2003). Ed. Xavier Antich. Barcelona: Galaxia Gutenberg, Circulo de Lectores, 2008.

El pensamiento artístico y crítico de Antoni Tàpies, recogido en esta colección de ensayos y entrevistas, parece más relevante  hoy día que en los momentos de su primera publicación. Respeto por la naturaleza, interdisciplinariedad y diálogo son la base de su obra plástica, visual, y también escrita. Lejos de caer en un misticismo gratuito, los ensayos de Tàpies recuerdan el poder del arte como acto de comunicación, al igual que sus muros pintados, que acoge y supera contradicciones, que construye puentes entre el este y oeste, entre un siglo y otro, entre el hombre y su cosmos.

Raoul Eshelman. Performatism, or, the End of Postmodernism. Colorado: The Davies Group Publishers, 2008. Traducción al castellano pendiente.

Aunque el título de este ensayo-libro del académico alemán-estadounidense puede despistar al lector (no propone realmente una ruptura con el postmodernismo, sino más bien, digamos, nuevas direcciones), Eshelman describe un fenómeno actual del arte: la forma de desfase o creciente divergencia entre la recepción de una obra (actitud, valoración, análisis, comprensión) y la obra misma (significados, potencialidad, mensaje). Llamando la atención a la insuficiencia de herramientas postmodernas a la hora de analizar obras de arte actuales, propone nuevos acercamientos ("post-posmodernos"), que aplica a disciplinas diferentes, como  la arquitectura, la literatura, el arte, cine, etc. El gran mérito del libro de Eshelman, mucho más quizá que  el mapeo mismo de las "nuevas teorías post", está justamente en plantear el estado de la cuestión al llamar la atención sobre la insuficiencia de las teorías postmodernas, tan enraizadas en el siglo pasado, y sumamente limitadas para nuestra era global.

Salvador Pániker. Asimetrías. Barcelona: Random House, 2008.

Para mí lo mejor y comprensivo del pensamiento de Pániker. Asimetrías es un libro-ensayo con un fuerte componente ético (sin moralizar o predicar) que anima a pensar, y que ayuda a vivir. Como en obras anteriores, Pániker re-examina críticamente el pensamiento occidental de una manera "retroprogresiva". Sin embargo, como el subtítulo indica, no se trata de una obra tradicionalmente filosófica dirigida a especialistas o académicos. Más bien, son "Apuntes para sobrevivir en la era de la incertidumbre," accesibles y de gran interés para cualquier lector. Estos apuntes, o "filosofía," si queremos llamarla así, divididos en ensayos profundos, cortos y manejables, son sobre todo una invitación a repensar críticamente nuestras tradiciones, religiones, opiniones, y actitudes occidentales, para recuperar valores disminuidos o hasta perdidos, al recordar que "la esencia de la persona es relación". Si la modernidad proclamó la muerte de Dios, y la posmodernidad el fin de las trascendencias, Pániker nos anima a abrir los ojos a nuestra nueva era de hibridismo, y recobrar en ella (y gracias a ella) otro tipo de trascendencia, a la vez íntima y colectiva, llamándola empatía, solidaridad, pluralismo, y respeto al próximo.

 

Samuel Andrés Arias

http://elcuadernodesamuel.blogspot.com/

La vida breve de Juan Carlos Onetti. Creo que no hay mucho que decir, excepto que llegué a ella tarde. Pero ¿qué es tarde? si la ventaja de los libros es que son pacientes y saben esperar al lector el tiempo que sea necesario. Fue llevada a juicio en El cuaderno de Samuel.

 

El manual del distraido de Alejandro Rossi. Sobra decir que también llegué tarde a Rossi. Si así era escribiendo, no me imagino el placer que debería ser charlar con él cara a cara.

 

Trabajos del reino de Yuri Herrera, editado por Periférica. Es una bonita fábula literaria sobre el narco mexicano. Ver la reseña que le hizo Camilo Jiménez en su blog El ojo en la paja.

 

El viento agitando las cortinas de Juan Carlos Rodríguez. Es el primer libro de cuentos publicado por este autor. Muy bueno. De los pocos que valen la pena de lo recientemente publicado en Colombia. Fue llevado a juicio en El cuaderno.

 

El viaje a la ficción de Mario Vargas Llosa. Confieso que soy un ferviente "vargasllosista" (siempre y cuando estemos hablando de literatura). Estos ensayos, además de disecar con inteligencia y tacto la obra de Onetti, muestran un profundo amor por el autor uruguayo, devoción que comparto con Vargas Llosa.

 

 

Julio Ortega

 

1. Españoles

Julián Ríos: Puente de alma, Galaxia. Ríos hace en el idioma español lo que los grandes narradores del inglés hacen hoy con el suyo:  utilizarlo no como un instrumento para representar el mundo sino como una materia para des-representarlo, libre del sentimentalismo, el lugar común, y la confesión campantes.

Manuel Vilas: Aire nuestro, Alfaguara. Vilas se ha propuesto inspirar la próxima gran rebelión de los lectores que batallan contra la resignación de un idioma peñas arriba. Y no lo hace desde fuera sino cuerpo a cuerpo, en la pública esfera redundante, contra los sucesos que acontencen en la rúa.

Vicente Luis Mora: Tiempo, Pre-Textos.  Más suelto de versos, estos poemas restados del tiempo, como su libro de deshoras, lo consagran, refutan, interrogan, cristalizan, plenos de sanidad sonora.

José Ovejero: La comedia salvaje, Alfaguara.  En el espejo de Goya, desde el carnaval esperpéntico de Valle Inclán, esta alegoría postula que la vida española está fundada en la violencia. Una pesadilla de la que sólo se puede salir leyendo.

Juan Francisco Ferré: Providence, Anagrama. Tiempo sin silencio, el nuestro, nos dice Ferré, está hecho como un nuevo retablo de las maravillas.  Con humor y vitalidad, se sobreimpone a sus interlocutores nortamericanos, no sin desenfado gozoso en un español, por fin, universal.

 

 

2. Latinoamericanos

Sergio Ramírez: El cielo llora por mí, Alfaguara. Deliciosa parábola policial de la búsqueda improbable de la verdad en un mundo que prescinde, rentablemente, de ella. Todo lo que nombra lleva la feliz urgencia de hacernos parte de su relato.

Cecilia Vicuña and Ernesto Livon Grosman, eds. The Oxford Book of Latin American Poetry, Oxford University Press. Espléndida edición bilingue que suma, traduce y resume la larga vida de la poesía latinoamericana, desde sus voces nativas hasta sus voces de relevo.

 

César Gutiérrez: Bombardero, Norma. A partir del ataque a las Torres Gemelas, esta edición accessible recorre las instancias del horror contemporáneo (la política sin polis, la civilizacion sin civitas), de cuyas ruinas sólo nos queda el horror, la risa y la novela.

Rodrigo Fresán: El fondo del cielo, Mondadori. Fresán no se rinde al éxito de una u otra de sus novelas, y lo apuesta todo a un nuevo camino.  Posee el genio de la variedad, y cada escena suya es más cierta en ilusiones ganadas.

María Auxiliadora Alvarez: Las nadas y las noches, Candaya. A Mario Campaña, editor de diálogos trasatlánticos, se debe esta muestra de una notable poeta venezolana, heredera del gran Juan Sánchez Peláez, cuya poesía completa (Lumen)  a punto de ser convertida en pulpa, es recuperada por esta vigilia de filiaciones y reparaciones. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

[ADELANTO EN PDF]

profile avatar

Julio Ortega

Julio Ortega, Perú, 1942. Después de estudiar Literatura en la Universidad Católica, en Lima,  y publicar su primer libro de crítica,  La contemplación y la fiesta (1968), dedicado al "boom" de la novela latinoamericana, emigró a Estados Unidos invitado como profesor visitante por las Universidades de Pittsburgh y Yale. Vivió en Barcelona (1971-73) como traductor y editor. Volvió de profesor a la Universidad de Texas, Austin, donde en 1978 fue nombrado catedrático de literatura latinoamericana. Lo fue también en la Universidad de Brandeis y desde 1989 lo es en la Universidad de Brown, donde ha sido director del Departamento de Estudios Hispánico y actualmente es director del Proyecto Transatlántico. Ha sido profesor visitante en Harvard, NYU,  Granada y Las Palmas, y ocupó la cátedra Simón Bolívar de la Universidad de Cambridge. Es miembro de las academias de la lengua de Perú, Venezuela, Puerto Rico y Nicaragua. Ha recibido la condecoración Andrés Bello del gobierno de Venezuela en 1998 y es doctor honorario por las universidades del Santa y Los Angeles, Perú, y la Universidad Americana de Nicaragua. Consejero de las cátedras Julio Cortázar (Guadajara, México), Alfonso Reyes (TEC, Monterrey), Roberto Bolaño (Universidad Diego Portales, Chile) y Jesús de Polanco (Universidad Autónoma de Madrid/Fundación Santillana). Dirije las series Aula Atlántica en el Fondo de Cultura Económica, EntreMares en la Editorial Veracruzana, y Nuevos Hispanismos en Iberoamericana-Vervuert.  Ha obtenido los premios Rulfo de cuento (París), Bizoc de novela breve (Mallorca), Casa de América de ensayo (Madrid) y el COPE de cuento (Lima). De su crítica ha dicho Octavio Paz:"Ortega practica el mejor rigor crítico: el rigor generoso."

Obras asociadas
Close Menu