Skip to main content
Category

Blogs de autor

Blogs de autor

En nombre de la rosa

La noche del pasado domingo, tras la derrota electoral, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, habló por teléfono con sus hijas. ?Entonces, papá, ¿hemos perdido??, le preguntaron apenadas. Ahí estaba su guardia pretoriana, los que cerraron filas cuando otros las reventaban: César Luena, Óscar López, Antonio Hernando, que contemplaron cómo el jefe desparramaba ternura paternal: ?No os preocupéis, tampoco es tanta la distancia con los ganadores?. Sánchez no estaba satisfecho con el resultado, había perdido las elecciones pero no se desplomaba. Su carnet de baile era tremendamente endemoniado, y Schz puede tener cierta gracia quitándose vocales pero ninguna moviendo las caderas. Espigado, apuesto ?la belleza penaliza?, algo menos atildado que Albert Rivera pero a la vez más Hollywood, y por supuesto más pulcro que Pablo Iglesias, el líder socialista ha tenido que gestionar pasado y futuro: generacionalmente se alinea con los líderes de Ciudadanos y Podemos, pero su partido tiene 136 años de historia. A ella ha apelado varias veces; lo hizo al empezar el debate con Rajoy en TVE sin miedo a renegar de una identidad maltrecha, demasiado zarandeada por la hecatombe económica. Una herencia envenenada que Sánchez ha sabido llevar con discreción, a pesar de ser recibido con una fría superioridad intelectual por los elefantes socialistas. Uno de sus gestos más característicos consiste en apretar la mandíbula, y sonreír, de tal forma que no sabes si lo está pasando francamente bien o mal. Su tensión es educada y risueña, pero la huella indeleble del esfuerzo asoma en el entrecejo como cuando en el mitin sevillano le coreaban ?Se nota, se siente, Pedro presidente? y él alzaba el brazo junto a Susana Díaz, que, muy descortés, no dejó que pegaran ni un cartel con la apostura del líder. Pedro Sánchez lleva un año y medio de campaña, desde que fuera nombrado secretario general. Primero quiso seducir a las bases, demostrarles que se lo ha currado a fondo, que lleva 14 años en política y que ha cerrado grifos, incluso para Pepe Blanco. Y después a la ciudadanía, al español optimista y esforzado que quiere reflejar. Cuántas veces hemos escuchado el relato del político joven y algo desengañado que pasó por la cola del paro, y que mientras escribía su tesis doctoral recorrió España, pueblo a pueblo, en coche, durmiendo en casa de militantes. Es su storytelling. Aunque el perfil que más ha potenciado es el de exjugador de baloncesto, bregado en el Magariños, que responde a un modelo de hombre saludable y tenaz, competitivo y ambicioso, casado con una mujer guapa y lista, y que se ha visto obligado a luchar contra su propio físico para competir con los apparatchiks. Sánchez ha buscado momentos muy Suárez en la campaña, mirándose el puño de la camisa, por ejemplo; o incluso en su lapsus de la aprobación de la Ley del Divorcio (no la hizo el PSOE sino la UCD, pero como si así hubiese sido). O cuando exclamaba ?¡madre mía!?, con ese punto marujón tan del presentador Vázquez en Sálvame ?programa al que, curiosamente, llamó en directo en su primera escala mediática? . Con un background familiar progre, chico de barrio (Tetuán) que estudió economía en la Complu y profesor de economía en la Camilo José Cela, no ha alardeado de político-profesor al estilo de Iglesias y compañía aunque sus trayectorias sean similares. Snchz no se cortará a la hora de tomar decisiones. Quienes le conocen dicen que es buen fajador y que puede pasar de la audacia a la imprudencia, como cuando le ofreció un escaño a Irene Lozano. Astuto, removido por los faldones del rencor, y poco empático con los barones con quienes no ha querido irse a tomar unas cañas y pelillos a la mar, ha sido acusado de frívolo debido a sus constantes rectificaciones. Le han dado por muerto en varias ocasiones. Ayer se barajaba de nuevo su defunción política, la que cual Némesis, la diosa de la venganza, le vaticinó Rajoy después de la estocada. El suyo no es un cariño pegajoso como el de Susana; es un roce helado y con un punto amargo, más de gin tonic. (La Vanguardia)

Leer más
profile avatar
22 de diciembre de 2015
Blogs de autor

Si cae Schengen, cae Europa

Grecia es el eslabón débil de la construcción europea. Las dos grandes crisis europeas de los últimos cinco años, que han hecho temblar la entera estructura en la que se sostiene la arquitectura de la Unión, han entrado por el país heleno. Primero fue la crisis del euro, cuya existencia llegó a peligrar por el endeudamiento insostenible de Grecia, y obligó a los tres sucesivos rescates de la economía griega, además de conducir a profundas reformas del sistema monetario y bancario europeo para evitar una repetición. Ahora es la crisis de los refugiados provenientes de Siria, Irak y Afganistán ?un millón y medio en lo que va de año, de los que la mitad al menos han llegado por Grecia?la que está situando al borde del estallido el Acuerdo de Schengen que garantizaba la libre circulación de ciudadanos dentro del espacio europeo.

Angela Merkel estableció una ecuación cuando empezó la crisis de la deuda griega ?si cae el euro, cae Europa?, que bien podría valer ahora para la crisis de los refugiados: si cae Schengen, también caerá Europa. A la vista de lo sucedido durante todo 2015 y de las previsiones para 2016, no está claro que la UE sea capaz de aguantar la llegada de dos millones de refugiados o incluso más, casi todos por un mismo camino que pasa por Grecia, un país sometido al desbordamiento de sus sistemas de control fronterizo y de su capacidad de acogida justo en mitad de la crisis política producida por los recortes sociales a los que obligaba el tercer rescate.

Ahora Schengen cuelga de un hilo. El Tratado prevé suspensiones temporales y excepcionales que pueden llegar hasta los seis meses, como la que ha aplicado Francia con motivo de la Conferencia del Clima y otros países como Austria, Dinamarca o Suecia por la llegada de los refugiados. Algunos responsables de Interior quisieran contar con la posibilidad de suspender el acuerdo durante dos años, con la idea de dejar fuera a Grecia mientras dure la crisis de los refugiados. Como sucedió con el euro, el país más periférico de la UE se enfrenta a la idea de una marginación que podría empezar como temporal pero fácilmente podría convertirse en definitiva.

Bruselas se reconcilia con Turquía y prepara una guardia de fronteras para salvar la libre circulación También como en la crisis del euro, es Alemania quien carga con la factura más abultada. Es el país que ha recibido el grueso de los refugiados y el que lleva la batuta en la salvación de Grecia, con una cadena de iniciativas de difícil aceptación dentro de la UE: primera, asegurar un reparto racional de los refugiados que ya han llegado a territorio europeo entre los otros socios; segunda, obtener un acuerdo con Turquía para que frene la llegada de nuevos refugiados y acepte la devolución de los que sean rechazados; y tercera, convertir las actuales fronteras porosas y descontroladas de la UE en Grecia, los Balcanes y el Mediterráneo en unos límites exteriores bien custodiados.

Cada una de las tres tareas encuentra sus propios obstáculos, aparentemente de improbable salvación. Respecto a las cuotas de asilados, la resistencia de los países socios es enorme, por una cuestión de principio como es la soberanía; también por la carga económica y política; e incluso por la presión de una inconfesada islamofobia que les conduce a aceptar solo refugiados cristianos. De momento, hay un acuerdo de reparto de 120.000 en dos años, sobre los dos millones que se esperan; pero solo se han asignado 200.

También la colaboración de Turquía requiere contrapartidas que no todos los socios de la UE aceptan de buen grado. Para que Ankara asuma el papel que los europeos le quieren asignar hay que reabrir las negociaciones de adhesión a la UE paralizadas por Francia y Alemania desde que empezaron hace diez años; aprobar una exención de visados para los ciudadanos turcos que viajen a la UE; y disponer 3.000 millones de euros del presupuesto europeo en ayuda a Turquía para atender a los refugiados en su territorio.

La mayor dificultad radica en la tercera pata, la más estratégica, como es la creación de una Guardia de Costas y Fronteras europea que vigile los límites exteriores de la Unión, tramite las solicitudes de asilo, rechace a quienes no las cumplan y garantice los controles de seguridad para evitar la entrada de delincuentes y terroristas. Las resistencias nacionales a tal iniciativa serán todavía mayores, no tan solo por el incremento de costes y el aumento de personal de la actual Frontex, la modesta agencia que se encarga de apoyar a los Estados en su gestión nacional de la frontera exterior, sino de nuevo por la cesión de soberanía real que significaría dejar en manos de Bruselas la posibilidad de intervención en las fronteras, incluso sin el acuerdo del Estado miembro afectado.

Si el euro ha conducido a la pérdida de la soberanía bancaria y presupuestaria, la Guardia de Fronteras conduce a una cesión de soberanía que afecta a la seguridad e incluso a las relaciones con terceros países. Una Europa con una frontera exterior custodiada en común sería un salto hacia la unión política que los euroescépticos temen y rechazan.

En Grecia se han juntado la crisis de endeudamiento con la de los refugiados, pero en el conjunto de Europa la amalgama es todavía mayor. Los atentados de París del 13-N han conducido a la injusta identificación entre terrorismo y refugiados, que ha sido atizada por las extremas derechas de varios países con beneficios electorales para sus posiciones populistas y antieuropeas. La crisis también afecta a las relaciones con Turquía y Rusia, países que están sacando ventajas de las debilidades de la UE.

Las mayores dudas respecto al futuro de Schengen surgen de la lentitud exasperante de la reacción europea frente a la velocidad de una crisis que afecta a la seguridad interior, a las fronteras exteriores e incluso a los valores democráticos y liberales de nuestras sociedades. Si se supera, será verdad que es en el peligro extremo donde los europeos encontramos la salvación.

Leer más
profile avatar
22 de diciembre de 2015
Blogs de autor

Contra, sin, para con Cataluña

Con esta, son ocho las ocasiones en que los catalanes han acudido a las urnas desde 2010, cuando Artur Mas ganó por primera vez las elecciones autonómicas y anunció que Cataluña iniciaba su propia transición democrática con el propósito de ejercer el derecho a decidir. Han sido dos legislativas, dos municipales, tres generales y una consulta alegal sobre la independencia de Cataluña, que han sacudido, fragmentado y modificado el mapa político catalán, en un adelanto de la transformación que ahora acaba de producirse en el mapa español.

Nunca se había votado tanto en Cataluña y nunca se había votado bajo tan solemnes advertencias sobre el efecto del sufragio para el futuro. ?El voto de tu vida?, advertía la propaganda del Gobierno en las últimas autonómicas, las que fueron convocadas con pretensiones plebiscitarias. La historia ha llegado cansada a la cita electoral de ayer, después de haber sido invocada una y otra vez para firmas de documentos, conmemoraciones, declaraciones y naturalmente llamamientos a las urnas. Pero al final ha llegado, aunque ha sido en unas elecciones españolas que superan en capacidad transformadora a cualquier elección democrática desde las de 1977.

En las condiciones en que se han celebrado las elecciones generales en Cataluña, sin gobierno y sin rumbo claro del proceso soberanista, era evidente que su resultado iba a dilucidar varias incógnitas. Sobre el liderazgo del rupturismo en Cataluña, en favor de Podemos, que supera largamente a Esquerra. Sobre el liderazgo del nacionalismo, en favor de Esquerra y en detrimento de la vieja Convergència, imparable hacia la autodestrucción, y solo consolada por el cero absoluto de Duran i Lleida, el antiguo socio y ahora archienemigo.

También se ha dilucidado la fuerza del derecho a decidir, extensísima en votos y en diputados catalanes ?¡y ojo!, españoles? , y comprobado la inclinación de la pendiente en votos y diputados en que se desliza la independencia. Estos resultados son un consejo oportunista para independentistas: antes Mas que marzo, mejor evitar el batacazo en las urnas de marzo y hacer a Mas presidente, aunque esté descalificado y debilitado, sea un presidente agónico, un cadáver político al frente de un proceso que se halla bajo la amenaza de ser absorbido por un proceso mayor y más potente como será la transformación renovadora de la democracia española.

La aportación de Cataluña a esta trasformación es notable, especialmente el impulso de cambio de la nueva izquierda aglutinada por En Comú Podem, al estilo de lo que sucedió en la transición entre el PSC i el PSUC. Pero no se trata únicamente de una aportación desde Cataluña, sino desde el conjunto de la pluralidad hispánica, sin la que no se explica que Podemos llegue a situarse tan alto, como segunda fuerza en número de votos. Sin Cataluña no se entiende el resultado de Podemos, pero ahora se trata de saber cuánto contará Cataluña, es decir, la España plural, en la organización de este paisaje transformado que hoy se abre ante nuestros ojos.

Leer más
profile avatar
20 de diciembre de 2015
Blogs de autor

Balada de amor y dolor

?La vida cambia rápido. La vida cambia en un instante. Te sientas a cenar, y la vida que conoces se acaba. El tema de la autocompasión?. He leído infinidad de veces estas palabras. Incluso se han sentado a mi lado en el coche o en el avión a modo de alerta, de tijeras que cortan la foto de una vida por la mitad. Fueron las primeras líneas que Joan Didion pudo escribir, en mayo del 2004, después de que John Gregory Dunne, su marido y compañero literario durante cuarenta años, se derrumbaba ?un 30 de diciembre? fulminado por un ataque al corazón. Acababan de visitar a su hija Quintana, en la UCI. Ella superó el coma, pero meses después fallecería en California a causa de una embolia pulmonar. Las dos muertes destruyeron y a la vez zurcieron, y de qué manera, la vida de uno de los grandes nombres del nuevo periodismo, menos célebre que los de Capote, Wolfe o Gay Talese, pero recuperado con brío desde finales de los ochenta. Uno de sus libros, El año del pensamiento mágico, marca un antes y después en la exposición del duelo, y ha influido en toda una generación de cronistas que no necesita recurrir a la novela para escribir en serio y en grande. Así identifica Didion la mirada de quienes acaban de perder a alguien querido: ?es la mirada de quien sale de la consulta del oftalmólogo con las pupilas dilatadas a la radiante luz del día?. Sus fotos de los años setenta son magnéticas. Tan californiana, guapa, libre, con su cigarrillo y su escocés, sus faldas largas, su mirada llena de silencios risueños. De joven, burguesa y bohemia, ganó un concurso de ensayo de la revista Vogue tras graduarse en literatura inglesa en Berkeley. Siguió en Life, The New York Times o The New Yorker. Con John formó tándem en los años del Hollywood postestudios. Eran una pareja chic tan envidiada como cómplice. ?Nuestros días estaban llenos de la voz del otro. Muchos suponían que debíamos de ser competitivos, que nuestra vida privada debía de ser un campo minado de envidias profesionales… Esto estaba tan lejos de la realidad que sugería ciertas lagunas en la comprensión de lo que es un matrimonio?, escribiría más tarde. Los amigos de la pareja aseguraban que se necesitaban el uno al otro para respirar. Didion es una gran reportera. Se aproxima a la realidad con alejamiento brechtiano, profundidad analítica y el manejo brillante de la primera persona. Sus artículos sobre la vida en Hollywood, los conflictos familiares, una visita al barrio hippie de San Francisco, las violaciones en el Central Park neoyorquino o la vida en los presidios del país son joyas que borran las fronteras de los géneros. Ha escrito cinco novelas. Pero con el citado El año del pensamiento mágico y Noches azules, dedicado a su hija, coronó su escritura sobre el dolor. Hoy, recién cumplidos los 81 años, es aclamada por la crítica y buscada por las marcas de lujo como Céline. Hace un par de meses, ha aparecido en EE.UU. la primera biografía sobre ella, The last love song, de Tracy Daugherty, demasiado polite, en la cual ella no ha querido participar. Aún así se ha convertido inmediatamente en best seller. ?Creo que mi visión de la muerte no cambió tan radicalmente con la pérdida de John y la de Quintana; ahora son muy pocas las cosas negativas que me pueden suceder?. Didion tardó años en tirar los zapatos de su marido por si algún día volvía: se había aferrado al pensamiento mágico para sobrevivir. De nuevo la literatura como salida en tromba. Como fijador. Hasta que consigue atrapar entre páginas la vida que se marchó. Cámara maestra / Annie Leibovitz Practica un retrato elocuente que refleja lo simbólico. Quien fuera el gran amor de Susan Sontag, la fotógrafa de las estrellas, autora de la última foto de Lennon, de aquella Demi Moore embarazada en Vanity o de la reina Isabel II sin corona, ha presentado su calendario Pirelli. Sin desnudos ni obviedades: mujeres carismáticas como Serena Williams, la artista iraní Sherin Neshat, Yoko Ono con medias de rejilla a sus 82 años… Lo verdaderamente importante rara vez se ve a simple vista. En las alturas / Rafael Sánchez Ferlosio La oportuna recuperación que Debate está haciendo de uno de nuestros más clarividentes y misteriosos escritores, Rafael Sánchez Ferlosio, es un manjar exquisito. Altos estudios eclesiásticos, el primer tomo de sus ensayos, muestra al esmerado estilista además de razonador alérgico a simplificaciones y tópicos manidos. También el erudito que igual trata del término ?feminidad? que de la sintética visualidad del haiku japonés. Moderno es poco. Un placer; uno por página. Tigres-leones / Gerard Piqué Incluso a Japón le siguen llegando los reproches y tirones de oreja gratuitos: que si no se siente español, que si reírse de sus compañeros del Madrid es antideportivo? Él justifica que todo este fuego lo aviva el morbo, pero no por ello calla. Y los medios deportivos se frotan las manos, claro: en un país tan cainita como España, la gresca y el pique de Piqué son ejercicios aeróbicos. ?Como el aire que exigimos trece veces por minuto?, que diría el poeta. (La Vanguardia)

Leer más
profile avatar
19 de diciembre de 2015
Blogs de autor

«Cazador de avutardas» (1919)

 

La caza de avutardas no es un tema común en la pintura española, quizá porque nunca fue común su caza. El autor del cuadro, Adelardo Covarsí Yusta (Badajoz, 1885-1951), deja constancia de un tiempo en que la especie aún no había iniciado el camino hacia la decadencia. Hoy, extinguidas las avutardas en la mayoría de las regiones españolas, cuesta trabajo contemplar el lienzo sin sentir repugnancia ante un lance que, cuando menos, resulta inexplicable.

Leer más
profile avatar
19 de diciembre de 2015
Close Menu
El Boomeran(g)
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.