Skip to main content
Escrito por

Lluís Bassets

Lluís Bassets (Barcelona 1950) es periodista y ha ejercido la mayor parte de su vida profesional en el diario El País. Trabajó también en periódicos barceloneses, como Tele/eXpres y Diario de Barcelona, y en el semanario en lengua catalana El Món, que fundó y dirigió. Ha sido corresponsal en París y Bruselas y director de la edición catalana de El País. Actualmente es director adjunto al cargo de las páginas de Opinión de la misma publicación. Escribe una columna semanal en las páginas de Internacional y diariamente en el blog que mantiene abierto en el portal digital elpais.com.  

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

Una visión Ikea de Europa y del mundo

Entre los puñados de ideas excelentes y ocurrencias brillantes que hay en ?La deriva de España? de Enric Juliana se encuentra la del ?giro Ikea? efectuado en el 37 congreso del PSOE, celebrado en julio del pasado año: ?El PSOE actual no tiene tantas cabezas ?profesores, periodistas y obreros han cedido el paso de manera irreversible a los profesionales de la política- pero cierta visión de conjunto sí que la tiene. Una cierta idea de España sí que se constató en su 37 congreso. Una visión Ikea de España. No es un símil despectivo. La multinacional sueca de muebles y objetos del hogar se ha convertido en un referente de la Europa contemporánea. Ikea es un gran fenómeno cultural: oferta variada, diseños agradables, precios asequibles y móntatelo tú mismo?. Nada de giro a la izquierda, escribe el periodista, sino giro Ikea.

La idea me parece tan sugestiva como para aplicarla también al europeísmo de Zapatero y su Gobierno, así como a su política exterior, es decir, la forma de situar a España respecto al ancho mundo. El Grand Tour de esta semana del presidente del Gobierno nos ofrece una buena muestra: recorrerá en avión tantos kilómetros como Barack Obama, en su caso desde Santiago de Chile hasta Estambul. El registro de melodías ideológicas y políticas será tan rico como el de Obama: con los países progresistas reunidos en Viña del Mar (Chile); con el G 20+2, donde sacarse la espina de que España no estuviera en Bretton Woods; con la Alianza Atlántica levemente desairada por el asunto de Kosovo; con la Unión Europea que presidiremos el próximo año; con la Alianza de Civilizaciones, es decir, curas y hombres piadosos de todas las religiones, además de Erdogan, en Estambul. Todas ellas piezas de la república independiente de mi casa, que ligan por el designio y el gusto de su propietario, pero tienen un peso específico ligero y evanescente. Tienen toda la razón algunos comentaristas también levemente zapateristas: no hay para tanto con lo de Kosovo. Y tu más: tampoco el PP tuvo un Gobierno fiable. O, si no, acordémonos del enfado del secretario de Estado, Colin Powell, que tuvo que desplegar sus mejores artes para mediar entre Rabat y Madrid en el enorme conflicto de Perejil. Es verdad, reconozcámoslo: Kosovo es a Zapatero lo que Perejil a Aznar, y eso sin considerar la mancha insoportable de las Azores. En uno y otro caso se demuestra, además, la levedad de la propia España, sobre todo cuando son leves quienes la conducen. Con una política y con otra, además, se comprueba que la coherencia y la fiabilidad, cosas graves ciertamente, han desertado de la política exterior española desde hace tiempo y no han regresado todavía. También el consenso ha desertado, algo que explica muchas cosas. Como todo es útil como proyectil en la pelea entre oposición y Gobierno, al final ni un solo plato queda indemne de la trivial pelea. Este país empezó a desguazar con Aznar la política exterior de la que se había dotado al final de la transición y con Zapatero nada se ha reconstruido: cuanto más, hemos amueblado el apartamento con la oferta coloreada y divertida, funcional y bien diseñada, pero frágil y barata de Ikea.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
30 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

El Grand Tour

Siete días de viaje ?del 1 hasta el 7 de abril-, recepciones oficiales en tres capitales ?Londres, Praga y Ankara-, tres cumbres internacionales ?del G 20 ampliado, de la OTAN y con la Unión Europea-, dos discursos trascendentales ?sobre las relaciones transatlánticas y sobre proliferación nuclear-, encuentros bilaterales con una cuarentena de primeros ministros y jefes de Estado ?desde Isabel de Inglaterra hasta el presidente chino, Hu Jintao-, y tres toros peligrosos que hay lidiar y matar: la recesión económica global, el programa nuclear iraní y la guerra de Afganistán. Estos son los elementos que entran en el primer viaje de Barack Obama a Europa como presidente de los Estados Unidos y segunda salida al extranjero; durante unas horas el nuevo presidente estuvo en viaje oficial en el vecino Canadá. Son unas ?vacaciones europeas?, según palabras irónicas de Robert Gibbs el pasado viernes ante los periodistas en la sala de prensa de la Casa Blanca.

La nueva Administración americana ha sembrado su acción exterior de signos que hay que ir decodificando cuidadosamente. Hay un cambio en la tradición: el primer viaje del presidente no fue al gran vecino del sur, México, sino a Canadá; al igual que el primer viaje de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, no fue a Europa, sino a Asia. Poco antes de que Obama parta hacia Londres, su vicepresidente Joe Biden habrá regresado de su viaje a Latinoamérica, donde ha participado en la cumbre progresista de Viña del Mar, en Chile, y en una cumbre centroamericana en Costa Rica para preparar la Quinta Cumbre de las Américas que se celebrará en Trinidad Tobago el 19 de abril de abril. A su vez, la señora Clinton estará también el martes en La Haya para un asunto de trascendencia como es una Cumbre sobre Afganistán, justo a los pocos días de que su presidente haya lanzado una nueva estrategia, que significa un incremento en 21.000 soldados de la presencias de fuerzas norteamericanas en el país asiático. El viaje de esta semana es, pues, la primera prueba internacional de Obama, en la que se podrá observar cómo funciona su tan admirado liderazgo a la hora de concertar políticas con otros estados soberanos, con intereses distintos y en muchos casos divergentes. Llega con el trabajo de imagen internacional más que culminado: en realidad lo consiguió ya en su anterior viaje a Europa, en agosto de 2008, cuando reunió a más de doscientos mil jóvenes en el Tiergarten de Berlín y alcanzó uno de los momentos culminantes en la obamanía. No hay que olvidar que lo pagó inmediatamente en las encuestas, en las que declinó ligeramente su ventaja, que quedó triturada poco después con el lanzamiento de la candidatura de Sarah Palin como vicepresidente por parte de John McCain. La crisis no había golpeado todavía a Wall Street, momento en que su marcha hacia la Casa Blanca se convirtió en imparable. Obama llega a Europa con necesidad de rematar alguna jugada. Si todo queda en bellas palabras, sin que sigan los hechos, su figura empezará a quedar recortada, por la desconexión entre ilusiones y realidades, esperanzas difusas y objetivos concretos, retórica y política. Esto es especialmente serio con relación a la recuperación económica: si la cumbre de Londres del G-20 ampliado no se convierte en un trallazo que haga reaccionar a todos, inversionistas, ahorradores, Gobiernos, empresas y bolsas, puede ensancharse mucho más el círculo vicioso de la frustración y del desánimo. Y además, en tal caso ya compartirá él mismo parte de las responsabilidades. Lo mismo cabe decir de los principales capítulos que ocuparán su viaje: las relaciones con Irán (en la reunión de La Haya, adonde acude una delegación de Teherán, pueden producirse contactos y noticias); el compromiso de desarme con Rusia; o la recuperación del pulso trasatlántico (a pesar de la languidez y de la desidia europeas). Habrá que atender especialmente a la parte turca del ?grand tour? de Obama: el presidente quiere reafirmar la amistad con Turquía y la importancia de su pertenencia a la Alianza Atlántica y quizás a la Unión Europea en el futuro. La Casa Blanca ya ha puntualizado que este viaje a Ankara y Estambul no es el viaje prometido en los primeros cien días a un país musulmán; siendo Turquía un país musulmán, esto significa que habrá otro y que el capítulo turco sirve para subrayar especialmente las relaciones entre Washington y Ankara y nada más. De momento. Zapatero también está haciendo su ?grand tour?, pero su periplo deberá ser objeto de otro comentario. Por hoy, ya basta.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
29 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

Carolingia ya no vive aquí

La huella de la dominación imperial suele ser muy duradera. Han pasado 20 años, pero en los países del antiguo bloque comunista hay todavía cosas que no encajan y reacciones que no se corresponden. Si en los años Bush allí creció la enemistad contra la vieja Europa, en los años Obama que estamos inaugurando aparece la semilla de otra enemistad, ésta vez contra Estados Unidos. Lo ha demostrado con creces el primer ministro de la República Checa, Mirek Topolanek, con la osadía de calificar las medidas de Obama contra la crisis como de ?camino hacia el infierno?. Es muy singular esta encrespada expresión de doctrinarismo ideológico. Topolanek es un primer ministro dimitido, que preside un Gobierno interino como resultado del voto de censura que acaba de derribarle. Su crítica a Obama, expresada como presidente semestral de la UE ante el Parlamento Europeo, no puede ser más inoportuna e ineducada, a pocos días de la llegada del presidente norteamericano a Praga, donde se celebrará la cumbre UE-EE UU. Topolanek se irá, nueva falta de educación, sin haber ratificado todavía el Tratado de Lisboa, que debe firmar el presidente de al República, el euroescéptico y negacionista del cambio climático Vaclav Klaus.

Europa se encoge, cada vez más pequeña y provinciana, y se aleja, cada vez más periférica e irrelevante. Los nuevos socios del centro y del este de Europa pesan de forma determinante en esta evolución. Su temor a Rusia y sus complejos de antiguos satélites les conduce a engallarse contra Bruselas y Washington, en el momento en que la crisis les golpea y más necesitarían de unas relaciones cálidas y una cooperación estrecha. Les gusta el pequeño Estado-nación tan superado por los acontecimientos y la globalización, a pesar de que ha sido en la etapa de unidad europea cuando más han prosperado y avanzado en todos los sentidos. Dividido y sin rumbo preciso, justo en un momento de cambio trascendental, este viejo continente se enfrenta a la recesión y al cambio de modelo económico de la peor manera posible. Estos males del Este europeo también los sufrimos aquí, en una modalidad específica hispánica. Enric Juliana, el corresponsal de La Vanguardia en Madrid, lo sintetiza en tres crisis acumuladas: una severa crisis económica en forma de L, el abrupto final del festín y una tremenda perplejidad ante un mapa que nos ubica en la periferia. El título de este drama, ?Carolingia ya no vive aquí?, le sirve para encabezar el capítulo donde se observa como España, al igual que Europa, se encoge y aleja en un mundo de mapas cambiantes que sitúan a China y Estados Unidos mucho más cerca. El libro se titula ?La deriva de España? (RBA) y sobre él mantuvimos ayer en CNN+ un pequeño debate el autor, José Maria Calleja y yo mismo.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
27 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

El estado del periodismo en 2009

El informe anual sobre el estado del periodismo norteamericano se está convirtiendo, de año en año, en un documento cada vez más crucial para entender lo que está ocurriendo con este oficio. Lo realiza el Pew Project for Exellence in Journalism desde 2005 con el objetivo de mantener la atención despierta sobre la pérdida de calidad del periodismo e incluso sobre los peligros que se ciernen sobre la misma esencia del oficio, como es el proporcionar información comprobada y veraz a los ciudadanos para que puedan ejercer como tales en sociedades libres y abiertas. Cada año aparecen nuevas sombras en este informe anual, del que puede leerse un extenso y sustancioso resumen proporcionado por la institución que realiza anualmente el estudio. Además de recomendar la lectura quiero anotar aquí algunas reflexiones sobre dos capítulos del informe: uno referido a la evolución de la prensa, elemento que destaca especialmente en un estudio donde todos los medios reciben la correspondiente atención; y el otro en relación a la cobertura periodística de la última campaña electoral norteamericana. Ambos capítulos merecen una lectura con lentes más próximas, trasladando sus reflexiones a nuestro entorno.

La industria de la prensa, empieza diciendo el State of the News Media (SNM), "ha entrado en 2009 en algo peligrosamente próximo a la caída libre". Por tercer año consecutivo "el fondo no está a la vista". Los autores del informe no quieren ejercer de agoreros truculentos, pero apenas lo consiguen: "Todavía no suscribimos la teoría de que la muerte de la industria es inminente". Tienen un argumento sólido: durante 2008, todavía obtuvo beneficios en su conjunto. Señalan la dificultad que supone reinventarse como negocio en el mismo momento en que toda la atención está fijada en realizar fuertes y rápidos recortes de gastos para enfrentarse a la recesión. Y expresan sus dudas de que una industria tan madura pueda reconvertirse a estas alturas, cuando está ya muy avanzada la transición, y sea capaz de atraer el talento innovador y empresarial propio de la nueva industria digital. Muchos datos y reflexiones más nos permiten obtener un cuadro muy sombrío del estado de la prensa escrita en el país donde mejor ha funcionado históricamente y se han venido produciendo las innovaciones mayores. Observar lo que allí está sucediendo permite adelantar un poco la visión sobre lo que nos sucederá a nosotros dentro de poco tiempo.

Son muchos los capítulos de interés en SNM, pero sólo dedicaré unas líneas más a glosar otro punto, el que se refiere a la cobertura electoral, escrito por dos maestros del oficio, como son Bill Kovach y Tom Rosenstiel, autores de un manual que es ya un clásico sobre el periodismo de calidad: Los elementos del periodismo (Editorial Aguilar). El periodismo político se está convirtiendo en más pasivo y reactivo que antes, señalan como primera conclusión los dos veteranos periodistas, a partir de su análisis de la campaña presidencial de 2008. En esta elección presidencial ha actuado más "como conducto o facilitador de las campañas que como reporterismo sobre hechos desconocidos y todavía no cubiertos que plantea preguntas con criterio independiente". Esta creciente pasividad tiene que ver con los recortes de gastos en las salas de redacción, la dedicación de los periodistas a alimentar otras plataformas (blogs, sites de Internet, twitter...), el control más estricto y sofisticado de las direcciones de las campañas sobre la prensa o la inundación de material informativo que llega a los periodistas sin posibilidad de discriminar y orientarse. El extremo de esta situación se encuentra en las cadenas de televisión por cable, donde sólo el 23 por ciento del material informativo corresponde a periodistas que controlan el mensaje, mientras que el resto es directo o formato de tertulia y comentario.

La cultura del autobús electoral que sigue a los candidatos ocupa la segunda conclusión de Kovach y Rosenstiel. Periodistas cada vez más inexpertos son los que cubren a los candidatos, y lo hacen como 'empotrados' en la campaña, al estilo de los enviados especiales con el ejército americano en Irak. Todo esto produce un tipo de periodismo distinto, en el que cuenta poco la respuesta a la pregunta que se hace el público sobre quién es la persona que quiere ser presidente y todo se centra en transmitir el mensaje de la campaña para que el público haga su propia valoración. Tercera conclusión: el boom de las encuestas, 1'58 de promedio al día, conduce a cubrir la campaña como una carrera de caballos: ¿quién gana?, ¿quién pierde? y ¿por qué?. La cobertura de los medios refuerza y magnifica los resultados de las encuestas y las buenas encuestas a su vez conducen a que mejore la cobertura de los medios. En cuarto lugar, muchos medios, sobre todo los de cobertura continua, subrogan parte de la información de la campaña a los 'spin doctors', especialistas e incluso comentaristas de partido, en buena correlación con la creciente pasividad del periodismo. Quinta conclusión, el papel de Internet ha sido grande en esta campaña, pero al contrario de lo que la gente piensa, el papel de los medios tradicionales también. Ha sido una campaña híbrida, con una gran interrelación entre medios tradicionales y nuevos. Y última, la comprobación de hechos, programas y declaraciones de los candidatos (fact checking) ha mejorado enormemente y se ha incrementado el número de instituciones especializadas en este tipo de seguimientos, algo que está escasa o nulamente desarrollado en España.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
23 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

Bofetada a la OTAN

Habrá que descifrar esta decisión española de propinar una sonora bofetada a la OTAN con la salida de las tropas españolas de Kosovo. Se produce pocos días antes de la cumbre del 60 aniversario, que se celebrará en Kehl, en la frontera franco-alemana, y justo cuando la Asamblea Nacional francesa aprueba el último paso para la reintegración en los comités militares de los que todavía estaba ausente. Con la primera legislatura de Zapatero tuvimos un desaire en dirección a Washington, no tanto en la salida prometida de Irak, cuanto en su precipitación y en el llamamiento después a abandonar a Estados Unidos. Con la segunda tenemos otro desaire pero en dirección a Bruselas.

Aparentemente hay que buscar los motivos en la situación anormal que significaba participar en la misión de la KFOR sin reconocer al nuevo Estado kosovar. España ha tenido trece meses para retirarse debidamente, siguiendo los protocolos de consultas entre aliados. No tan sólo no lo ha hecho sino que ahora ha optado por esa segunda espantada, con el aplauso, todo hay que decirlo, de los tendidos de derecha y de izquierda. Es de lo más curioso el amplio consenso español respecto a mantener con Kosovo la misma posición que Grecia, Rumania y Eslovaquia, los otros países de la OTAN que no han reconocido al nuevo Estado, como si tuviéramos una soterrada vocación que nos acerca a los países balcánicos, tan separatistas ellos, a la hora de poner en alerta nuestros sensores antiseparatistas.

Recordemos toda la retórica acerca del antecedente kosovar en los meses previos a las elecciones generales. Desde el Gobierno español llega el mentís a cualquier relación con el traslado del esfuerzo militar, en dinero y en soldados, a otro escenario, ahora mucho más serio y crucial en la escena internacional, como es Afganistán. Ojalá este mentís sea un mero señuelo para despistar y esta vez la potencia media europea que es España pueda echar una mano seriamente a Estados Unidos en la resolución del gravísimo rompecabezas de Afpak (Afganistán-Pakistán), que es donde se juega la seguridad mundial para los próximos años. Si fuera este el móvil de la jugada, habría que dar por buena la salida, porque podría servir incluso para reforzar el debilitado papel que la OTAN tiene asignado en el país asiático. Si no es así, y todo hay que explicarlo en clave de sostenella y no enmendalla, habrá que decir que la cosa es entonces mucho más grave e inexplicable.

No voy a repetir hoy los argumentos que aconsejaban hace algo más de un año el reconocimiento de Kosovo. Es cierto que la situación sobre el terreno no ha mejorado, pero tampoco ha retrocedido, y que ni una cosa ni la otra obligan de nuevo a la precipitación en la salida. La noticia se ha conocido, por boca de la ministra de Defensa, Carme Chacón, cuando nueve comunidades autónomas, entre las se incluye la capital, están en pleno puente de San José, uno de esos momentos para lanzar de forma calculada determinadas noticias. Decía que habrá que descifrar la decisión, pero también pedir explicaciones. Uno de los mayores defectos de los que puede hacer gala un Gobierno es eludir el escrutinio detallado de la opinión pública.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
20 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

Sobre racismo en tiempos de crisis

El racismo, la xenofobia, la discriminación y la intolerancia suelen pegar con más fuerza con las vacas flacas. De ahí que sea un amargo sarcasmo observar cómo el combate contra estas pestes se convierte en instrumento de los más bajos intereses políticos en manos de regímenes despóticos que utilizan estas banderas antirracistas para cubrir sus vergüenzas y transferir a otros las responsabilidades de sus tropiezos y desmanes. Lo hemos conocido en otras ocasiones, pero ahora estamos de nuevo embarcados en otro gran circo internacional en el que se debatirá sobre estos temas, para terminar con toda probabilidad en una pelea propagandística que nada aliviará la discriminación y la exclusión que sufren cientos de millones de personas en el mundo, aunque servirá, en todo caso, para debilitar los esfuerzos por encaminar de nuevo la paz en Oriente Próximo.

Del 20 al 24 de abril se celebrará en Ginebra una Conferencia Internacional contra el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia, organizada por Naciones Unidas y destinada a revisar las conclusiones de otra reunión anterior, la que se celebró en Durban (Suráfrica) en 2001. Si dos anteriores conferencias de este tipo, en 1978 y 1983, se habían centrado en la condena del desaparecido régimen racista de Suráfrica y de su sistema de<i> apartheid</i>, en Durban fue Israel la diana de casi todos los ataques y debates, hasta el punto de que el foro paralelo de organizaciones no gubernamentales convirtió el acontecimiento en la ocasión para identificar el sionismo con el racismo. Las condenas y reparaciones por el esclavismo sufrido por los pueblos de África también fueron entonces objeto de agrios debates, en los que representantes de regímenes despóticos africanos pudieron señalar con el dedo a los países democráticos occidentales como culpables de este pasado más que centenario. La nueva reunión ha añadido un tema más a esta agenda de agravios frecuentemente unidireccionales contra los países europeos, Estados Unidos e Israel: la Conferencia Islámica está intentando conseguir algún tipo de resolución de condena "de la difamación contra todas las religiones y en particular el islam y los musulmanes".

Hay que subrayar el esfuerzo de la diplomacia de la ONU para quitar de las resoluciones finales de estas conferencias las expresiones más ofensivas e inconvenientes. Buena parte de las más inflamadas denuncias suelen venir de dictaduras impresentables, que son tratadas con comprensión y benevolencia por muchos socios de Naciones Unidas. Pero el efecto público de estas conferencias, organizadas por iniciativa de la Asamblea General, y con visible protagonismo de representantes de países tan poco ejemplares como Cuba, Libia o Irán, no puede ser más nefasto. De su comportamiento tan poco edificante pudieron deducir los <i>neocons</i> que rodeaban a Bush su generalizada aversión a cuanto saliera de la ONU y su declarada voluntad de convertirla en una institución irrelevante. Israel y EE UU abandonaron la reunión de Durban en 2001, para no hacerse cómplices de aquel aquelarre de manipulación del antirracismo. Ahora la Administración de Barack Obama ha declarado también su intención de no asistir a la reunión de Ginebra, después de un primer tanteo en el que Washington pudo comprobar la inconveniencia política de su participación.

Es una triste paradoja que EE UU, país con una larga y profunda historia de racismo sobre sus espaldas, no juegue un papel de gran protagonismo en el año en que puede lucir precisamente  a su nuevo presidente, salido de su comunidad secularmente discriminada. Probablemente así lo exige su política hacia Oriente Próximo, que no le impedirá en cambio asistir a la reunión de la Alianza de Civilizaciones con Erdogan y Zapatero en Estambul a principios de abril, porque además le sirve de contraejemplo: jugando sobre el mismo registro de problemas quiere tender puentes donde los otros cavan trincheras. Detrás de EE UU e Israel ya han declarado su ausencia Canadá, Australia e Italia. La actitud del Gobierno de Berlusconi es especialmente curiosa, pues contrasta con el empeño por estar que ha manifestado un Estado tan amigo y tan romano como el del Vaticano: probablemente porque le interesa contar en el debate sobre la lucha contra la difamación de las religiones impulsada desde el mundo islámico. La Unión Europea en su conjunto está también tentada por el abstencionismo en Ginebra. Y ya que ni EE UU ni la UE han podido evitar el secuestro de la conferencia antirracista por regímenes poco recomendables, más preocupados y activos debieran estar por la formación en Israel de un Gobierno que no acepta la fórmula apoyada incluso por Bush de los dos Estados conviviendo en paz y seguridad y por la llegada de un político partidario de la limpieza étnica, como Avigdor Lieberman, al Ministerio de Exteriores israelí, cuestión que constituye por sí sola un obstáculo a toda interlocución seria y da una buena ración de carnaza a la fiera.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
20 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

En crisis: y en transición

Van cayendo una detrás de otro. Cabeceras centenarias, que se confunden con la historia de las ciudades a las que han servido. Agobiadas por un mercado publicitario que ya no acude a sus páginas y por unas ventas de ejemplares desfallecientes: los jóvenes están desertando en masa. Lo que se está hundiendo no es un negocio, es un mundo. Complejo y sofisticado, que gasta energía y materias primas a mansalva y está quedando irremediablemente obsoleto. Dentro de unos años nos parecerá una curiosidad como las viejas locomotoras a vapor esta industria que tiene que movilizar tantos recursos, mano de obra e instalaciones industriales, todo para conseguir leer impreso sobre papel lo que se puede leer en un teléfono o en un pequeño ordenador portátil. Ya es ahora mismo un ser antediluviano que todavía se mueve, un fósil vivo y capaz de ganar dinero a espuertas hasta hace bien poco tiempo.

Lo que está sucediendo estos días en Estados Unidos es sólo el principio. En Europa llevamos algunos años o alguna crisis de retraso. Pero también llegará. Y muy pronto, más de lo que se suele creer. Ahora las ciudades donde se han producido estos dramas periodísticos se quedan con un solo diario. Y muy pronto no quedará ninguno: no me parece un dato marginal que Seattle, la ciudad de Microsoft, sea una de las que tiene más números para que suceda. Existe ya un observatorio de la muerte de los diarios que hay que consultar cada día para ver cómo están de fastidiadas las cosas.

La muerte, también la de un periódico, es una transición. Primero llega la enfermedad, a veces súbita e inesperada. Luego los esfuerzos para salvarlo. Finalmente el desenlace. Y naturalmente, el duelo, que a veces se convierte en una tragedia: somos incapaces de aceptar la nueva situación. En Denver la muerte ha sido total: el Rocky Mountain News ha dejado de salir en todas sus versiones, papel y digital. Se acabó. La transición es a la nada. Otros en la ciudad, empezando por el competidor y socio Denver Post y siguiendo por los portales de internet o los blogs, deberán llenar el hueco. En Seattle la muerte es también una resurrección: con menor tamaño de la redacción (de 165 a 20 redactores), con nuevos directivos, con unas ambiciones mucho más acotadas, el Seattle Post-Intelligencer seguirá en Internet, donde tendrá que competir con otros.

Todos siguen el mismo modelo: primero se entra en pérdidas, luego se intenta sin éxito una venta ventajosa, mientras una deuda más o menos pesada tira hacia el fondo del mar el pobre cuerpo del ahogado. Al final, hay un día en que los propietarios no se ven capaces de seguir pagando y perdiendo dinero. Y echan el cierre. Vamos a tener noticias de este tipo con mucha frecuencia este año. La crisis, claro. Pero mucho más que la crisis: la transición.

En el mundo de después los periódicos en papel, los quioscos, todos los ritos cotidianos que acompañan a esta vieja costumbre, tendrán un lugar marginal si existen. El mundo posperiodístico puede tener muchos inconvenientes, pero se me ocurre que no debiéramos entretenernos mucho tiempo en las ceremonias de duelo y mucho menos en las ocurrencias europeas de subvencionar de nuevo la prensa, como si ya no la hubiéramos conocido y no supiéramos a quienes aprovechan. Lo que hay que hacer es armarse de valor e inteligencia para pasar página cuanto antes y de la mejor manera posible. Llorar sobre la leche derramada no devolverá el líquido a la jarra.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
20 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

Escombros de la Guerra Fría

Estados Unidos se dispone a retirar su proyecto de escudo antimisiles, que iba a instalarse en Polonia y Chequia, con el objetivo de defenderse de la hipótesis de un ataque, que podría ser incluso nuclear, desde Irán. El movimiento tiene un aspecto estrictamente táctico: si Washington consigue congraciarse con Moscú para reforzar su posición negociadora sobre el desafío nuclear de Teherán, puede también iniciar la dinámica virtuosa que conduzca a recuperar los esfuerzos por la paz en Oriente Próximo: para Israel, la cuestión central de su seguridad no radica en Gaza ni en Cisjordania, sino en el lejano Irán. Pero también hay un aspecto estratégico, mucho más trascendente, que trabaja en la misma dirección de la recuperación de la escalada de desarme iniciada al final de las Guerra Fría. Pero este elemento pone en cuestión una de las ideas más arraigadas en el pensamiento estratégico norteamericano: que con su aplastante superioridad económica y tecnológica no hay ningún obstáculo insalvable para Estados Unidos.

El reciente movimiento de Obama respecto a Moscú tiene, así, el valor adicional de que subvierte el valor central que significó el final de la Guerra Fría. Según una información ayer del diario USA Today, Estados Unidos se ha gastado desde 1985 casi 150.000 millones de dólares sólo en cuestiones vinculadas a los escudos antimisiles, lo que con Ronald Reagan fue bautizado como Guerra de las Galaxias. El escudo que se iba a presupuestar y montar ahora iba a costar entre 9.000 mil y 13.000 mil millones de dólares. Pero según numerosos expertos sus garantías de funcionamiento, entonces y ahora, son muy bajas. El número de fallos es enorme: los mejores ensayos de la actual tecnología no superan los cinco aciertos sobre trece disparos.

La teoría implícita en estos proyectos es que algún día Estados Unidos se convertirá en un país invulnerable gracias a su poderío tecnológico y económico. Aunque sea una quimera ha tenido una funcionalidad y una eficacia demostradas, como pudo comprobarse en la competición con la Unión Soviética: gracias a un reto tan elevado Moscú no pudo seguir en la carrera tecnológica, arruinó su economía y tuvo finalmente que rendirse. Repetir la jugada ahora de nuevo con Rusia o con Irán no era tan sólo levantar un obstáculo a la acción exterior norteamericana sino equivocar los términos del enfrentamiento con las potencias emergentes que puedan significar un peligro para la seguridad.

En el actual momento de recesión económica y de cambio de modelo de capitalismo es todavía más absurdo elevar los presupuestos de defensa en un sistema que no ofrece ni conseguirá ofrecer nunca una seguridad completa y no jugará ningún papel en la erosión de los gobiernos enemigos; antes al contrario, quizás los reforzará. Dejar a un lado el poder del dinero y de la tecnología, sin embargo, es empezar a modificar parte de la ideología más genuinamente norteamericana. De confirmarse, éste movimiento estratégico será uno de los cambios que caracterizará la era política que ha empezado con la victoria de Barack Obama.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
20 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

En crisis: las listas

Cada circunstancia tiene sus listas. Y cada tipo de listas tiene sus aficionados. La recesión no iba a ser una excepción. Listas de ganadores y de perdedores, por ejemplo. Listas de empresas en quiebra. Listas de bancos y aseguradoras subsidiados por los Gobiernos. Listas de medidas para atajar la crisis, de cada país y por países. Las listas se adaptan muy bien a las sociedades competitivas y al funcionamiento del mercado, que se rige precisamente por la lista de mayor valor que son las de los mercados de valores. Incluso cuando el mercado está en crisis, la lista de la crisis tiene valor. La lista de Madoff, por ejemplo, publicada hace mes y medio, proporcionó pistas interesantes sobre la confianza que había llegado a suscitar este peculiar personaje, ahora encarcelado. Pero no era una buena lista porque no incluía un dato básico: las pérdidas de cada uno de sus clientes.

La lista de lo que han perdido los más ricos, publicada esta pasada semana por la revista Forbes, sí nos permite saber quien ha sido el campeón: el financiero indio Anil Ambani, que el año pasado también lo fue, pero entonces de verdad en ganancias. Su fortuna se ha quedado en 8.000 millones de dólares, después de perder casi 40.000 millones. Todos han perdido, hasta el punto de que ha bajado el listón para entrar en el pelotón de los veinte más ricos, ahora 14.000 millones, en vez de los 21.000 que se necesitaban el año pasado.

La evaluación ha sido siempre discutible. ¿Cómo se valora la fortuna de Joaquín Guzmán Loera, alias "El Chapo", al que Forbes sitúa entre los nuevos milmillonarios (billionaires)? El jefe del clan de Sinaloa, en paradero desconocido, ha merecido esta mención junto a los nuevas 38 fortunas que han conseguido crecer cuando los otros encogían, lejos todos ellos del arruinado mundo financiero y metidos en la economía real, y a veces demasiado real. Ahí es donde entra otra lista, la de los paraísos fiscales, ahora sometidos a fuerte presión para que no se conviertan en refugio del dinero que huye y sean en cambio fuente de esta liquidez tan imprescindible que no termina de llegar. La UBS (Unión de bancos Suizos) ha entregado ya a instancias de la justicia norteamericana una lista de 300 cuentas de presuntos defraudadores pero quiere los 28.000 que teóricamente tienen sus fortunas allí depositadas.

La lista más política es la que ha fabricado el Financial Times, y en concreto su director, Lionel Barber, Subjetiva pero mucho más interesante, nos ofrece el nombre de los 50 personajes decisivos para salir de la crisis, encabezada por Barack Obama. El pelotón de cabeza lo forman los políticos: buena opción, son los que tienen de verdad la mano a la hora de buscar soluciones. El segundo es Wen Jiabao, el primer ministro chino que acaba de expresar su preocupación por la seguridad de los ahorros invertidos en bonos nortamericanos. No hay ningún español en este grupo, que Barber ha tenido el humor de cerrar con Olivier Besancenot, el líder del nuevo partido anticapitalista francés.

Sólo hay dos españoles en el listado, Miguel Angel Fernández Ordoñez, como gobernador del Banco de España, y Jaime Caruana, como director general del Banco Internacional de Pagos con sede en Basilea. No está Zapatero, obviamente; tampoco Berlusconi. Sarkozy está muy bien situado, en cuarto lugar; pero detrás de Angela Merkel. La ausencia más significativa es la del presidente de la Comisión Europea, desaparecida en combate.

También hay listas prácticas y a la vez secretas. Por ejemplo, los once Estados prioritarios en la próxima reunión del G20, con la que el Foreign Office ha creado dos categorías de países dentro del grupo de los países más importantes. No están Rusia, tampoco Australia ni Canadá, relegados a la segunda división, junto a Argentina, Indonesia, Turquía y México. La noticia, publicada por el Financial Times, ni siquiera se molesta en citar como miembros de la segunda división a Holanda y España, invitados de honor, o a Chequia, que asiste por la presidencia europea semestral. En esta primera división, en la que están Japón, Francia y Alemania, está Italia más por su presidencia del G8 que por méritos propios, y también está la Comisión Europea,de presencia obligada a pesar de sus limitados merecimientos. Pero lo noticioso es que en el grupo de los dos más grandes, Estados Unidos y China, se haya incluido a Brasil, Surafrica, Corea del Sur y Arabia Saudita. He escrito 'práctica' respecto a esta lista: lo es, ya sabemos quién conforma el directorio de países que va a intentar poner orden en el planeta. Nada más significativo, en efecto, que la ausencia de Rusia.

Lo importante de las listas, sin embargo, es quién las hace. En este último caso ha sido el Reino Unido. Es la mejor forma de quedar bien colocado, aunque no haya muy buenas razones para ello.



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
20 de marzo de 2009

Eder. Óleo de Irene Gracia

Blogs de autor

Salvas de advertencia

Al nuevo presidente se le recibe con salvas de bienvenida. Pero entre toda la cohetería hay que saber escuchar también las salvas de advertencia. Desde el primer día ha tenido que contar Obama con ellas. La primera la lanzó el presidente ruso Dimitri Mdevedev, que en vez de felicitarle por su elección le amenazó con desplegar misiles en Kaliningrado (territorio enclavado en el perímetro de la UE y de la OTAN) en caso de que persistiera con la voluntad de Bush de construir un escudo antimisiles en Polonia y Chequia. El disparo de aviso ruso ha tenido su respuesta casi cuatro meses después, cuando la Casa Blanca ha mandado un mensaje apaciguador al Kremlin: el escudo antimisiles puede sustituirse por una concertación entre rusos y americanos frente al proyecto nuclear iraní.

Bush probablemente se equivocaba, pero no es seguro que Obama acierte proporcionando una imagen de debilidad ante Moscú. También es cierto que con un cambio de rumbo entre las dos presidencias tan brusco se hace difícil mantener los matices entre la dureza extrema y la rendición. Obama ha iniciado una política que el columnista del FT, Gideon Rahcman, ha calificado como la doctrina Aretha Franklin, por la letra de su famoso hit, Respect. En vez de mirar a todo el mundo por encima del hombro y de tratar con desconsideración incluso a los amigos y aliados, como hicieron Bush y los suyos, en la nueva Casa Blanca se ha impuesto la educación y el respeto, a los que deberán acompañar, naturalmente, la firmeza y la claridad de ideas. Respeto a Moscú, ex superpotencia susceptible y celosa ante la vulneración de los privilegios reales o supuestos que se le atribuían; respeto al socio económico imprescindible y probable superpotencia en pocos años que es China: respeto al mundo árabe y musulmán, con sus civilizaciones milenarias; respeto específicamente a los persas, nueva potencia regional, orgullosa de su pasado y de su actual soberanía. Un respeto que cabrá esperar hacia todos: América Latina, por ejemplo, y seguro que tendrá consecuencias benéficas.

Pero el respeto excesivamente escrupuloso también puede inducir a veces a la confusión. El primer punto en contra se lo hemos apuntado ya a Obama precisamente por su declarada negligencia sobre los derechos humanos en China, un mensaje que irá rebotando de dictadura en dictadura con resultados lamentables hasta las mismas puertas de América, donde el régimen castrista y castrense se prepara para torear una vez más las exigencias de libertad y democracia. Se entiende perfectamente que la primera manga internacional de su presidencia no fuera especialmente exigente en este capítulo: ahora mismo la prioridad es desatascar el rompecabezas del Gran Oriente Próximo, donde se encadenan los conflictos y hace falta una mecánica de precisión y una gran habilidad diplomática y política para la reignición del proceso de paz.

Pekín, lejos de corresponder amistosamente a la actitud norteamericana, ha repetido una jugada ya tradicional con cada nuevo presidente, como es poner a prueba sus nervios con un incidente militar de calibre perfectamente acotado: esta vez ha sido un buque de inspección, el Impecable, el que se vio acosado cerca de las costas chinas y en situación litigiosa con cinco pequeñas embarcaciones chinas.

Rusia y China son imprescindibles para cualquier movimiento, desde los votos en el Consejo de Seguridad, hasta los nuevos planes para Afpak (Afganistán y Pakistán), pasando por la salida en orden de Irak. La negociación entre Siria e Israel, una de las llaves para un nuevo orden en la zona, vendrá también favorecida por el auxilio de las dos grandes potencias; pero ésta será absolutamente imprescindible en la negociación directa entre Teherán y Washington. Un excelente movimiento en el tablero ha sido la iniciativa norteamericana de invitar a Irán a la conferencia sobre Afganistán que se celebrará a finales de mes.

Todo esto no debiera llevar a emitir un mensaje tan tosco y de consecuencias negativas como el que soltó la secretaria de Estado en su viaje a Asia. Aplazar la presión directa sobre los derechos humanos quizás, pero convertir su olvido en una política me parece abiertamente rechazable. Hay un motivo adicional para esta crítica, que va más allá de los derechos humanos. Obama está paseándose sobre el alambre y en cualquier momento uno de estos movimientos puede mandarle al suelo, es decir, a que empiece a perder autoridad internacional.

No ha sido una muy buena señal en esta misma dirección que un experto diplomático de prestigio como Chass Freeman se haya visto obligado a renunciar a la presidencia del Consejo de Seguridad Nacional para el que había sido nombrado por Obama como resultado de la presión ejercida por el llamado lobby americano-israelí. El capital de prestigio del presidente es muy grande, pero está claro que son muchos a derecha e izquierda quienes quieren erosionarlo, algo que sólo puede contrarrestar con firmeza y obtención de buenos resultados.

Las ocasiones para poner a prueba la autoridad de la nueva administración en esta etapa de nuevo respeto internacional serán numerosas, porque ahora estamos únicamente en un momento de apertura de juego, pero muy pronto estarán en marcha varios procesos nuevos, llenos de trampas y también de oportunidades. Habrá que seguirlos con la máxima atención, tanto por su interés intrínseco como por la prueba rigurosa que significará para la presidencia de Obama. Ya no serán disparos de advertencia, sino fuego real en la escena diplomática.

 



[ADELANTO EN PDF]
Leer más
profile avatar
20 de marzo de 2009
Close Menu
El Boomeran(g)
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.