Vicente Verdú
Hartarse de uno mismo
sería de lo más natural.
Y, sin embargo,
nos aferramos a ese tedio
A falta de un poste con mayor solidez
familiar.
Supuestamente
ser uno mismo
es un clavo, oxidado o no.
Ser uno mismo es una apostura,
Ser uno mismo es una estaca
y una apuesta de proximidad.
Ser uno mismo es el salvavidas
La zodiac frágil
Sabiendo sin rumbo hacia
otro equivalente lugar
donde atracar.