Sergio Ramírez
Los científicos del Instituto de Biología de Anfibios de la Universidad de Hiroshima han logrado crear una rana transparente utilizando la manipulación genética a partir de especimenes de un extraño tipo de rana albina. A través de la piel de esta nueva rana pueden verse todos sus órganos, y pueden también apreciarse sus funciones fisiológicas, con lo que ya no será necesario abrirlas con el bisturí, como suelen hacer, entre otros, los estudiantes principiantes de medicina.
Ante esta noticia se me ocurre pensar en la posibilidad de que un día se pueda crear seres humanos de piel transparente, con lo que sería posible admirar a plenitud nuestros órganos vitales, y estando de pie frente al espejo ver cómo reaccionan ante nuestras emociones y sentimientos: los hemisferios del cerebro, para empezar, donde advertiremos las reacciones eléctricas provocadas por nuestros malos pensamientos, o nuestras inspiraciones; las palpitaciones aceleradas de nuestro corazón ante la vista del ser amado, el hígado ennegrecido por el odio, el estómago que recibe con deleite los alimentos que tragamos, las glándulas sudoríferas que destilan copiosas nuestras miedo.
Seremos como una vitrina iluminada, que nos hará también testigos del progreso de nuestra propia muerte.