Sergio Ramírez
A partir de 1865 se declaró la Guerra de la Triple Alianza, o Guerra Grande, librada contra Brasil, Uruguay y Argentina, y que duró hasta 1870, en el curso de la cual murieron un millón de paraguayos, entre ellos el propio mariscal presidente, y sólo sobrevivieron niños, mujeres y ancianos, y un puñado de hombres. El país quedó en manos del imperio brasileño, y bajo la sombra de esta ocupación nació en 1887 el partido Colorado, fundado por el obediente presidente Bernardino Caballero. Los colorados gobernaron durante 60 años, y fue el partido único desde la llegada al poder del dictador Alfredo Stroesnner en 1947, hasta que éste fue derrocado en 1989 por su consuegro el general Alfredo Rodríguez, otro colorado.
A comienzos del siglo veinte, 79 personas poseían la mitad de la tierra, mientras campeaban la marginalidad, el atraso y el analfabetismo, que cubría al 80 por ciento de la población. Esta situación ha cambiado poco hasta ahora, como ha cambiado poco el imperio de la corrupción, que va del enriquecimiento ilícito de los gobernantes a la compra de votos, sobre todo a los indígenas más pobres de la población guaraní. Y cambiarla fue la bandera con que el antiguo obispo Fernando Lugo llegó al gobierno en 2008, el primer presidente que desde la independencia recibiera la banda presidencial como candidato de la oposición, derrotando al sempiterno partido Colorado, hasta que fue depuesto en 2011 por un golpe técnico.