Vicente Verdú
En ocasiones no vemos
lo evidente.
No amamos a quien nos quiere bien,
no queremos lo que nos beneficia,
no escogemos con tino
Escogemos a ciegas.
Sin ton ni son.
Y estando lúcidos, nos inclinamos
por lo peor de lo peor.
Esta es la genuina condición humana.
La esencia de la enfermedad,
de la muerte y la calamidad.