Vicente Verdú
La voz de las personas
es una inmediata
habitación
limpia o seca,
suave o escarpada.
Cada voz ofrece
la sombra
de una construcción
interior
difícil y
altamente compleja
que se desarrolla
,sin embargo,
espontáneamente
y sin enmienda fácil.
La propia voz
significa a la vez
que la voz
es propia de sí.
Ajena
a la vista
y no asociable
verazmente
a otra identidad.
Cualquier
identidad
se independiza
a su vez
de su prestancia
o su desazón.
Escuché entonces
una voz
que fue una cura
una llama
apagándose
entre el fuego integral.
Esa voz
que me indicó
entonces
el camino
incipiente
de una consolación
Y he olvidado
si fue
tierna o transparente
o blanca y azul.
Su indecible
sonido
se concentró
enseguida,
como una bala,
sobre el centro
del tímpano
Y allí dejé
de sollozar.