Vicente Verdú
Leí en el ABCD (suplemento cultural del diario ABC de Madrid. Nº 823) que Andrew Keen, uno de los primeros impulsores de las webs sociales, ha llegado a la conclusión, a los 47 años, de que todo esto de la red es basura.
El libro con que desarrolla su invectiva este británico, licenciado en Filosofía Moderna por la Universidad de Londres y mudado después a la Universidad de Berkeley, se titula The Cult of the Amateur donde, como se adivina, arremete contra el actual ensalzamiento de la creatividad del aficionado.
En su opinión todo conocimiento difundido en la red, desde el que parte de Google al que se solaza en la Wikipedia, adolece de inexactitudes, mentiras, desviaciones y una gruesa pila de bobadas.
Respecto a los blogs y los blogueros, dice: "Blogueamos como monos desvergonzados sobre nuestras vidas privadas, nuestra vida sexual, nuestros sueños vitales, nuestra falta de vida o sobre nuestras segundas vidas… Todos ellos están corrompiendo y confundiendo a la opinión pública sobre cualquier cosa, desde la política hasta el comercio, desde el arte hasta la cultura".
¿YouTube?: "Nada tan vulgar y narcisista como estos monos videográficos. Es una galería infinita de vídeos aficionados que muestran a unos locos desgraciados bailando, cantando, comiendo, lavando, comprando, conduciendo, limpiando, durmiendo o, simplemente, sentados ante sus ordenadores". ¿Caminamos, en fin, hacia una hecatombe? Efectivamente. "La democratización de Internet – afirma Keen- mina la verdad y el talento" ¿Monos y bobos todos? ¿El mismo Keen tiene un blog al que llama "La gran seducción" para ganar adeptos. Su dirección es: http://www.andrewkeen.typepad.com/.
Contra Keen, donde se le trata de paranoico.