
Ficha técnica
Título: Poema | Autor: Rafael Argullol | Editorial: Acantilado | Colección: Narrativa del Acantilado, 286 | Encuadernación: Rústica cosida | Formato: 13×21 | Páginas: 1136 | Fecha: abr-2017 | ISBN: 978-84-16748-35-8 | Precio: 29 euros
Poema
Rafael Argullol
Se diría que, impelido por una oculta necesidad, Rafael Argullol se propone en este libro un ejercicio, a un tiempo vital y literario: escribir diariamente, a lo largo de tres años, un fragmento. Día a día se va construyendo así la obra, a modo de captura de instantes, como reflejos de vida, de la Vida con mayúscula. La llamada de la belleza, la evocación, el miedo, la búsqueda, el amor construyen este texto extraordinario, profundamente bello, profundamente humano, que nos invita a viajar al misterio que todos somos. Así nace Poema, un libro lleno de libros que propone al lector un horizonte y una compañía íntima.
La escritura como origen, camino y guía a lo largo de tres años. Poema, de Rafael Argullol, es una aventura vital y literaria extraordinaria.
Comentarios de la prensa
«A cada paso sacuden al lector, provocados por no se sabe qué, relumbres de un instante, irisaciones de una plenitud nunca gesticulante ni gárrula, anticipaciones melancólicas de la belleza del mundo tras la muerte del autor». Ángel Prieto de Paula, Babelia
«Argullol crea y recrea un mundo en el que triunfan la belleza, la sacralizacion de lo pagano y la religiosidad del agnostico y en el que el lector se sumerge fascinado». Masoliver Ródenas, La Vanguardia
«Un libro excelente, para leer poco a poco, lentamente, de vez en cuando. Para leer poco y digerirlo bien». Josep Cuni, 8 Al Dia
«Un libro que nos puede aliviar, dada su calidad literaria y espiritual. Poema desvela que el caos del mundo se encierra, también, en nuestro interior». Fèlix Riera, La Vanguardia
«La hazaña que Rafael Argullol realiza con su libro Poema tiene pocos parangones en cualquier literatura». José Luis García Martín, La Opinión de Málaga
«Dietario, poemario, libro de ensayo, todo cabe en el compendio de Argullol, como parte misma de la belleza de la literatura». José Martínez Rubio, Valencia Plaza
«Como en la obra del Bosco, El jardín de las delicias, uno puede mirar a cualquier rincón que siempre habrá algo que sorprenda, algo que añada un nuevo fleco a la bufanda mental que el lector se irá construyendo al leer Poema. Es una delicia leerlo». Pedro Bosqued, Heraldo de Aragón
«Un repaso de esa mezcolanza de emociones viejas y estímulos novedosos que llamamos vida». Vanesa Gutiérrez, El Comercio
«Argullol extiende un extenso paisaje de la Condición Humana, que funde lo clásico con lo contemporáneo y nos ayuda a comprender en qué momento de nuestra historia nos encontramos.» Fèlix Riera, Economia Digital
Nota del autor
Poema fue escrito a lo largo de tres años, entre el primero de enero de 2012 y el primero de enero de 2015. Todos los textos pertenecen a este período, a excepción de cuatro, que fueron incorporados después. Corresponden a los días 1.º-IX-2014, 9-XII-2014, 17-XII- 2014 y 28-XII-2014, pero los escribí en algún momento posterior y aluden a acontecimientos posteriores. Ocuparon cuatro huecos que, por diversas razones, había en el manuscrito.
Imagino que en Poema han quedado registrados los pensamientos, sensaciones y recuerdos dominantes en cada jornada con respecto a mi vida y a la vida que sucedía a mi alrededor, tanto en lo concerniente al presente como al pasado. El lector, seguramente, deberá tener en cuenta este carácter de inmediatez en el paso de la experiencia a las palabras. Los contenidos de Poema son más una captura que una rememoración, aunque ésta, en ocasiones, también se hace palpable.
He creído conveniente, al final del libro, añadir un índice de los personajes que aparecen en Poema. Algunos son suficientemente conocidos; otros, desconocidos por completo, menos para mí.
1.º-I-2012
Nunca me gustaron las Nocheviejas,
esa festividad triste con máscara alegre,
pero ayer, inesperadamente, el jolgorio fue divertido:
la balsa flotante, el río helado,
los zíngaros coreando una canción interminable
por la que el tiempo circulaba lentamente.
Minutos antes de la explosión de medianoche
salí a tomar el aire en la cubierta.
El cielo rojo amenazaba con más nieve.
No había nadie, a excepción de un barquero
que amarraba su barca junto a la balsa.
Cuando lo hubo conseguido me habló
con palabras que no logré entender.
Sin embargo, pasados unos segundos,
sí entendí su mirada hermosa y fría:
comprendí quién era ese barquero
que había conseguido cruzar el río helado.
Miré el reloj, y volví a la fiesta
antes de que estallaran los aullidos rituales
que año tras año dedicamos a la muerte.
Me alegró ver de nuevo a los gitanos
que seguían, creo, con la misma canción.
Todo fluía como siempre, aunque afuera,
sin prisas, esperaba el formidable barquero:
el amor, el baile, el vino, el beso.
2 -I-2012
Ha empezado 2012,
un año que nadie quiere que empiece.
Todo son malos pronósticos,
y hasta se habla de un apocalipsis maya
que se nos llevará por delante.
Así las cosas, cualquier haz de luz
será recibido con entusiasmo,
como si nos visitara el sol mismo.