Javier Rioyo
Me llevo muy mal con la mecánica, casi tanto como con la informática. Me llevo mal con casi todo lo práctico. También con lo manual. No entiendo la electrónica. Y soy muy patoso colgando cuadros. No soy un buen pintor, de brocha gorda quiero decir porque siempre me imagino pintando otras cosas…artísticas? Con los deportes, si no contamos el billar y algunos más vergonzantes, tampoco me llevo muy bien. Lo que no quiere decir que no sea un buen espectador, aunque reconozco fanatismo "atléticomadrileñista" y algunos otros que tampoco contribuyen a dar más prestigio a mi biografía deportiva o intelectual.
Me gusta divagar, beber, viajar comer y otras cosas que dan placer sin hacer daño. Muchas horas de mi vida las he pasado leyendo. Otras ordenando libros que quizá nunca llegaré a leer. Por eso, y por muchas cosas más, nunca he encontrado tiempo para entender algunas cosas que nos rodean en la vida tecnológica, en el presente computarizado. Me voy adaptando como puedo. El otro día en una macrotienda de Londres estuve probando la lectura en un Ibook. Creo que no es para mí…y sin embargo, seguramente en unos años, quizás meses, ya me estaré negando a mí mismo me llevaré de vacaciones esos libros que no ocupan lugar, que no tienen tapas, ni se doblan las páginas por un ángulo, ni se hacen anotaciones en los márgenes. ¿Seré ese?
Creo que también.
De momento me entretengo con los cuentos breves a la manera tradicional que los de "Páginas de Espuma" han recopilado de la argentina cuentista, Ana María Shua. ¿Qué habrá sido de aquella lectora porteña tan amable, tan dulce que por aquí apareció unos meses?
La escritora Shua tiene un breve cuento que se llama "El domador de artefactos", está claro que hizo pensar. Me reconocí.
"Antes realizaba su número con lavarropas o televisores. Ahora lo que más impresiona al público es ver cómo le obedecen al instante y en forma simultánea diecisiete sumisas computadoras. Su número no es de los más populares y en el circo gana poco. En cambio, mucha gente paga por llevarlo a su casa después de la función"