Edmundo Paz Soldán
Todos tenemos nuestras quejas contra Aerosur; yo, de hecho, sumo diez horas de espera en mis últimos dos vuelos internacionales que tenían Santa Cruz como base: cinco, al llegar de Madrid; otros cinco, al volver. Durante esas horas de espera, a la compañía ni se le ocurre invitar un vaso de agua a sus frustrados pasajeros; y es imposible soñar con reembolsos de pasajes perdidos debido a los largos retrasos.
Esto, sin embargo, no es nada en comparación con la última de Aerosur. Según la noticia publicada hoy en El País, Aerosur niega el viaje a Bolivia a Carlos Zapata, enfermo terminal de cáncer en Madrid. ¿Las razones? Aerosur le exige a Carlos "que presente un certificado médico en el que se garantice que no va a morir durante el trayecto".
Lo único que quiere Carlos es volver a Bolivia a morir en paz. Los autores de la nota escriben:
"De nada ha servido el certificado médico que indica que el hombre "permanece estable" y que, "con la ayuda de oxígeno", se mantiene con un "94% de saturación", muy cerca del 100% ideal en una persona sana. Así lo afirma su médico de primaria, José Contreras, en un documento que la familia ha presentado a la compañía. La negativa ha sido rotunda. Aerosur, compañía aérea que opera en código compartido con la aerolínea Air Comet, lo justificaba así ayer inicialmente: "El oxígeno puede suponer un problema de seguridad". Luego, cuando se recordó a su portavoz que ésa no es la reglamentación, añadió como inconveniente la posibilidad de que el pasajero pueda morir durante el vuelo".
Esta noticia no necesita de mayores comentarios. ¿Y qué tal si cuando compramos un pasaje le exigimos a Aerosur un certificado que garantice que no se va a retrasar más de cinco minutos? Igual, nos quedaríamos cortos ante el cinismo y la falta de compasión de una aerolínea que solía ser buena.
actualización (miércoles, 6 de la mañana): leo en El País que Aerosur (operada por Air Comet) llevará hoy mismo a Carlos a Bolivia, y que incluso no le cobrará el pasaje. Qué bueno que Aerosur/Air Comet hayan decidido hacer lo correcto. Y habrá que decir que impresiona la influencia de El País.