Jean-François Fogel
Hoy me acuerdo del placer de los mexicanos cuando, en su época, se les preguntaba lo que pensaban de su Presidente, Miguel de la Madrid Hurtado. Utilizando las iniciales de su nombre y de sus apellidos formaban la sentencia definitiva: más de la misma historia.
MDLMH fue presidente desde 1982 hasta 1988, pero el concepto de una historia inmóvil sigue viva tanto en México como en otros países de América Latina. Basta hoy despertarse y repasar los sitios de información en Internet para sentir que se detiene el tiempo.
La Republica Bolivariana de Venezuela intenta “construir el socialismo del siglo XX” se traduce en el “Financial Times” de Londres por el título: “El control de precios en Venezuela provoca la escasez de comida”. El artículo dice que “el café, el azúcar y los fríjoles son difíciles de encontrar o faltan en las tiendas esta semana mientras los suministradores esperan conocer el precio oficial”. Cualquier persona que conoce la historia de los “mercados campesinos” y “agromercados” en la Cuba socialista sabe de qué se trata: MDLMH.
Argentina pagó por anticipado su deuda al Fondo Monetario Internacional. Esto se traduce en “Clarín” de Buenos-Aires por el título “Costo de vida: ahora la estrategia del gobierno es pasar el verano”. El artículo dice que “el gobierno ya definió que quiere un dólar de precio alto” (Argentina ya tiene la mayor inflación del continente, detrás de Venezuela). Cualquier persona que conoce la historia psicoanalítica y económica de lo que se llama “pizza con champaña”, es decir la ilusión compartida en la época del presidente Menem de que se puede manipular las tasas de cambio, sabe de qué se trata: MDLMH.
Perú se prepara para la próxima elección presidencial se traduce en “La tercera” de Santiago de Chile por el título “Hoy se inscribe candidatura de Fujimori ante el jurado nacional de elecciones de Perú”. El artículo dice: el mismo jurado ratificó en diciembre la inhabilidad que pende sobre Fujimori de presentarse a cargos públicos”. Cualquier persona que conoce la historia penal y política de los presidentes peruanos, es decir de la mezcla de demandas judiciales y sinvergüenzas activos que conforman el pasado reciente de la nación andina, sabe de qué se trata: MDLMH.
Para dar un poco de altura al día, mejor reabrir un clásico como “El Gatopardo” y comprobar la inagotable continuidad de los poderes más allá de los hombres y de las generaciones en la fórmula definitiva del maestro Lampedusa: “las cosas tienen que cambiar un poco, para que nada cambie”.