Edmundo Paz Soldán
Esta banda de Manchester liderada por el carismático Ian Curtis llegó a fines de los setenta, venció y se fue. La muerte temprana de Curtis, un cantante de voz y movimientos impactantes que sufría de epilepsia, convirtió al grupo rápidamente en leyenda. Con los años, su importancia e influencia no ha hecho más que crecer. La historia de Curtis puede ser una más de tantas sobre estrellas del rock torturadas y autodestructivas, pero lo que importa es que no se funda en la nada: el que escuche alguna de las canciones de Joy Division descubrirá el poder hipnótico de este grupo clave del post-punk, a quien tanto The Cure como The Smiths le deben muchísimo. The Best of Joy Division es un muy buen lugar para comenzar: han pasado treinta años, y canciones como "Transmission", "Love Will Tear Us Apart", "She’s Lost Control", "Atmosphere", "Heart and Soul" y "Isolation" se han vuelto clásicos.