
Eder. Óleo de Irene Gracia
Clara Sánchez
La editorial Maeva ha tenido la gentileza de enviarme un estupendo regalo de Navidad: el libro de Donald Friedman Y además saben pintar. En él podemos contemplar los dibujos y cuadros más o menos conseguidos de escritores que van desde Dostoievski y Proust hasta García Lorca y Sylvia Plath. Por lo general en las pinturas se reconoce muy bien el mundo imaginario de los escritores como, por ejemplo, el tono lúgubre de Patricia Highsmith, o el mucho más colorido y desenfadado de Bukowski. Sin embargo me han despistado Joseph Conrad y el estilizado William Faulkner. Y me ha parecido que Proust dibujaba casi tan mal como yo.
Es un libro muy interesante, que completa la visión que tenían del mundo creadores que admiramos profundamente. Se trata de una faceta muy conocida en Alberti, García Lorca o Günter Grass, pero que en otros casos es una auténtica sorpresa. Es como abrir una ventana y pillar alguien entregado a su pasión secreta. Se permite cotillear.