
Eder. Óleo de Irene Gracia
Marcelo Figueras
Hechas las mismas salvedades del último post (esto es: todavía no pude ver The Wrestler, Doubt, The Curious Case of Benjamin Button, Milk, Slumdog Millionaire, Defiance, Synechdoche, NY, Frost / Nixon, ni las dos últimas del hiperkinético Clint Eastwood: Changeling y Gran Torino, por mencionar algunos de los films con mejores críticas de los últimos tiempos), aquí va mi lista con las películas que más disfruté este año.
The Dark Knight. "La mejor película de superhéroes de la historia" según Stephen King, que además ofrece la siguiente analogía: "…es a esa clase films lo que El Padrino II fue a las películas de gangsters: un evento que redefine el género".
Rachel Getting Married. Kym (Anne Hathaway) sale de la clínica de rehabilitación para acudir al casamiento de su hermana. Todo lo que toca parece desintegrarse, hasta que Kym entiende finalmente algunas cuestiones sobre rehabilitación de esas que no te enseñan en ninguna clínica. Me conmovió profundamente.
Wall-E. Más lírica y comprometida con el destino humano que la inmensa mayoría de las películas "para adultos" que conozco. Wall-E y Eve me resultan inolvidables…
Leonera. La mejor película del argentino Pablo Trapero. Con una gran actuación de Martina Gusmán como Julia, la mujer que se (re)inventa a sí misma a partir de una maternidad que la sorprende -en todas las acepciones del término.
Che Part 1. Lejos de boicotearse mutuamente, la mirada seca y casi documentalista de Steven Soderbergh.
Y otras que son de años distintos, pero que iluminaron mis días durante el año 2008: Cool Hand Luke, de Stuart Rosenberg, Control, de Anton Corbijn, The Big Lebowski, de los hermanos Coen.