Ficha técnica
Título: Vida de Rousseau & retrato de Madame d´Houdetot | Autor: Mary Shelley | Edición y traducción: Socorro Giménez | Editorial: UDP | Páginas: 148 | ISBN: 978-956-314-330-0 | Precio de referencia: $15.000
Vida de Rousseau & retrato de Madame d´Houdetot
Mary W. Shelley
¿Una «Vida de Rousseau»? ¿Pero acaso Jean-Jacques Rousseau no escribió unas celebérrimas Confesiones en las que dio cuenta detallada de su propia vida? ¿Y no han corrido desde entonces ríos de tinta en torno a la obra y la personalidad del autor de Emilio y El contrato social? ¿Qué interés puede tener entonces una breve semblanza biográfica publicada en 1839 en el marco de una colección divulgativa destinada a los ingleses de clase media? Un interés grande, como comprobará por sí mismo el lector de este volumen. En primer lugar, la imagen que en él se vuelca de Rousseau está impregnada -por mucho que haya tenido ya lugar el gran cambio de rasante que supuso la Revolución francesa- por una sensibilidad y una escala de valores aún próximas a las de la época en que aquél vivió, algo que redunda en el efecto de cercanía que despide el retrato. Por otro lado, la autora de la semblanza es nada menos que Mary Shelley, esposa del poeta romántico inglés Percy Shelley, conocida popularmente por haber escrito una novela en muchos sentidos mítica: Frankenstein o el moderno Prometeo (1816). No es difícil detectar conexiones entre esa novela y la figura de Rousseau, como tampoco es difícil señalar las profundas huellas que ésta dejó sobre la obra y la vida de Mary Shelley.
Con todo, el mayor interés de este volumen (que también recoge el delicioso «Retrato de madame d’Houdetot», temprano apunte biográfico de la mujer de quien Rousseau se enamoró apasionadamente) lo constituye sin duda la revelación de Mary Shelley como precoz cultivadora de lo que cabe reconocer retrospectivamente -hechas las oportunas salvedades- como un precedente de historiografía feminista, llena en su caso de brío narrativo y -conforme observa Socorro Giménez en su esclarecedor prólogo a esta edición- imbuida de «un propósito pedagógico de alcance político».
PRÓLOGO
SOCORRO GIMÉNEZ
La intemperie
Padre, madre, amigo, marido, hijos: todos fueron parte del grupo que me trajo hasta aquí; y ahora todos, salvo tú, mi pobre hijo (y eres necesario para mi supervivencia), han desaparecido, dejándome sola para cumplir mi tarea. Que así sea.
Mary Shelley (1)
En abril de 1823, en el periódico londinense The Liberal apareció publicado un texto titulado «Madame d’Houdetot». Se trataba de un breve ensayo biográfico sobre Sophie Lalive de Bellegarde, condesa d’Houdetot, conocida como la mujer a quien Jean-Jacques Rousseau había dedicado sus palabras de amor más apasionadas. El ensayo -recogido en el presente volumen- se publicó sin firma, pero estaba escrito por Mary Shelley.
En ese momento, Mary ya era la autora de Frankenstein y de otras dos novelas (Mathilda y Valperga), vivía en Génova, y había enviudado hacía pocos meses. El poeta Percy Bysshe Shelley se había ahogado en julio de 1822, junto a su amigo el oficial de la armada Edward Williams, al hundirse su velero en las costas de la bahía de La Spezia, en la Liguria, y Mary Shelley se había quedado sola a cargo de Percy Florence, el único hijo que vivía de los cuatro que dio a luz.2 A su desconsuelo por la muerte de Percy se sumaba su precariedad económica, y estaba en tierra extraña, librada a la buena voluntad de familiares y amigos que le prestasen auxilio. «No puedo hablar», le escribía en una carta a su amiga Jane Williams, la reciente viuda de Edward, «pero puedo escribir, así que garabateo».
(1) Mrs. Julian Marshall, The Life and Letters of Mary Wollstonecraft Shelley, London, Richard Bentley & Son, 1889, vol. II, p. 40 (2 de octubre de 1822).