Ficha técnica
Título: Miguel Gila, vida y obra de un genio | Autores: Juan Carlos Ortega y Marc Lobato | Prólogo: Antonio Fraguas, Forges | Editorial: Libros del Silencio | Colección: Singular | Género: Biografía · Humor | ISBN: 978-84-939433-2-5 | Páginas: 416 | Formato: 22 x 14,5 cm.| Encuadernación: Cartoné | PVP: 24,00 € | Publicación: 12 de Diciembre de 2011 | Con la colaboración especial de: Malena Gila, Josema Yuste, Juan Marsé, Luis del Olmo, Javier Cansado, Luis M.ª Ansón y Lluís Bassat | Otros: incluye un CD de audio con los mejores monólogos de Miguel Gila
Miguel Gila, vida y obra de un genio
Marc Lobato
Miguel Gila fue y será recordado siempre como uno de los más grandes humoristas españoles. Su estilo, al mismo tiempo sobrio e hilarante, inteligente y naíf, surrealista y extremadamente ligado al mundo que lo rodeaba, marcó un punto de inflexión en la forma de hacer humor y ejerció una profunda influencia en las generaciones posteriores.
En este libro, de la mano del humorista Juan Carlos Ortega y el periodista Marc Lobato, recorremos su infancia y su juventud, frustrada por los sinsentidos de una guerra que tan bien reflejaría en sus monólogos; sus principios en la radio y el humor gráfico, y su fulgurante éxito sobre los escenarios. Un retrato próximo y entrañable para el que se ha reunido también una considerable cantidad de material inédito del autor, como poesías, obras de teatro y algunos de los monólogos que no llegó a representar.
«Es un hecho que Gila fue un impulsor primigenio de la caterva de humoristas que «nacimos» a la sombra de su personal punto de vista humorístico; todos nos sentimos «hijos» de su ingenio, y su recuerdo perdurará a través de los tiempos entre las majestades humorísticas españolas, los Reyes Magos del Humor: Cervantes, Quevedo y Gila. ¿Admiración excesiva? Ninguna admiración puede ser excesiva si se trata de Miguel Gila. Y si no, al tiempo.» Forges
LA GUERRA CIVIL
Entonces llegó mi tío Cecilio con un periódi-
co que traía un anuncio que decía: «Para
una guerra importante se necesita soldado
que mate deprisa». Y di jo mi abuela: «Apúntate
tú, que eres espabilao».
MIGUEL GILA , monólogo de la guerra
Desde las elecciones de febrero de 1936, las conversaciones políticas y la defensa de los valores de izquierdas eran más habituales de lo normal en las sobremesas de casa de los abuelos. Algunos militares veían con cierto recelo la victoria del Frente Popular y temían que la Segunda República acabara convirtiéndose en un régimen simpatizante con el comunismo o la anarquía. Se gestaba un golpe de Estado.
El 17 de julio, la guerra ya era prácticamente un hecho. Gila tenía diecisiete años y su interés por la política se limitaba a esas conversaciones domésticas y a lo que le contaban algunos de sus amigos. A pesar de ello, aquel viernes los rumores y las no ticias eran constantes. Toda España estaba pendiente de cualquier novedad. Sin pensárselo demasiado, Miguel y su amigo Pedro Tabares decidirían hacerse militantes de las Juventudes Socialistas. Tras el estallido de la guerra, se alistarían también para combatir en el frente.
Según les indicaron, Pedro formaría parte del Batallón Alpino y Miguel del Quinto Regimiento de Líster. No obstante, sin que supiera muy bien el motivo, este acabó sirviendo en el Regimiento Pasionaria, de marcado acento comunista. Sin apenas hacerse a la idea, mandaron a los nuevos soldados al cuartel, donde les entregaron las armas. A Miguel le correspondieron un fusil, ciento cincuenta balas y dos granadas de mano.