Marcelo Figueras
Por favor no se pierdan el documental sobre los Monty Python (Monty Python: Almost the Truth) que al menos aquí en la Argentina está emitiendo el canal de cable I.Sat los domingos a la una del mediodía.
Aquellos que los definen como el equivalente de Los Beatles en el terreno de la comedia no están descaminados. No sólo fueron coetáneos (el programa de TV Monty Python’s Flying Circus debutó en la BBC en 1969), sino que además compartían influencias (Lennon era tan fanático del programa humorístico de radio The Goon Show como los Python) y, en consecuencia, exhibían la misma preferencia por el humor absurdo y subversivo que hunde sus raíces en Lewis Carroll y al que llevaron a su máxima expresión en sketches como La Inquisición Española y El Ministerio de Andares Tontos (The Ministry of Silly Walks). De hecho George Harrison creó Handmade Films para ayudarlos a producir su película Life of Brian. Hasta el nombre que el grupo eligió para sí mismo (‘Monty Python’ pretendía sonar como el apelativo perfecto para un representante artístico de dudosa moralidad) no habría desentonado nada en el contexto de una canción como For the Benefit of Mr. Kite.
El documental proporcionará un gozo desmedido a todos aquellos que quieran saber más sobre los Python. De hecho cuenta con entrevistas a los cinco miembros sobrevivientes (Graham Chapman murió en 1989): John Cleese, Eric Idle, Michael Palin, Terry Jones y Terry Gilliam. (Sí, ese mismo Gilliam: el que después dirigió películas inolvidables como Brazil y The Fisher King.) También hablan aquellos a quienes frecuentaron durante su breve carrera y asimismo comediantes de hoy, revelando hasta qué punto se consideran influenciados por su irreverencia. (Es impresionante, sin ir más lejos, la forma en que Steve Coogan puede recitar sketches enteros imitando las voces de los Python a la perfección.)
Aquellos que no hayan tenido oportunidad de verlos en acción, encontrarán entonces en el documental la posibilidad de saborear sus mejores rutinas: en el segundo episodio, sin ir más lejos, se pueden ver El Sketch del Loro y La Danza de las Bofetadas con los Peces (The Fish-Slapping Dance), que casi me hace caer del sillón a causa de la risa. Los que se queden con ganas de más, irán de cabeza al canal propio que los Python tienen dentro de YouTube (www.youtube.com/MontyPython).
Al final de Manhattan, Woody Allen incluye en su Lista de Cosas por las que Vale la Pena Vivir a Los Hermanos Marx. Que me parecen geniales, por cierto; pero en mi lista, los que no podrían faltar son los Python.