Héctor Feliciano
Teresa explica por qué no votaría por Obama.
Vengo de un país en donde todo es retórica, dice, escuchar a Obama es como escuchar a Fox. Se me hace que no tiene algo real que ofrecer. Es sólo retórica.
Una vez, se ilusionó mucho con lo que Fox podía representar para México.
Yo fui de las que animó a mi familia de que necesitábamos un cambio.
Pero, la decepción fue grande y, ahora, se desconfía.
Tenemos miedo de las promesas vacías, insiste.
Aunque admite que, entre el superávit tan grande que existe y las dos guerras, será difícil, tanto para McCain como para Obama, realizar sus programas.
No está ninguno de los dos en la realidad, afirma.
Admira a Sarah Palin, la candidata republicana a la vicepresidencia.
Me recuerda mucho al presidente municipal de los pueblos de mi país, que conoce a todos, que era padrino de los niños en el pueblo.
Se me hace muy parecida en esos términos, pero rebelde.
Mi hermana tiene un hijo con el síndrome de Downs, y se identifica mucho con ella.
Estuvo deprimida un mes, pero, luego, tuvo que poner la depresión a un lado.
Se sorprende de los ataques de la prensa contra Palin.
¿Cómo la pueden criticar tanto si, de por sí, una madre tiene que trabajar tanto?
La veo a ella y refleja parte de aquello con lo que mi hermana se identifica.
Palin es una persona real, que siente y, por lo menos, sabe lo que es luchar, explica, Creo que es una self-made woman (una mujer que se hizo por sí sola NHF). Es una persona de pueblo.
Teresa concluye, no sé nada de política, pero es como relaciono esta situación con mi vida y con mi experiencia.
Es curioso, como decíamos, que Teresa favorezca a McCain.
Forma parte de una minoría dentro de la minoría hispana, pues apenas una tercera parte de estos votará por los republicanos en esta elección. Según las encuestas.
Ya, el martes 4, por la noche, sabremos si las encuestas nacionales eran tan precisas como se dice.