Skip to main content
Blogs de autor

La aventura de ser madre (1)

Por 18 de enero de 2008 Sin comentarios

Clara Sánchez

Tener un hijo no es fácil en los tiempos que corren. Todo son inconvenientes, que si el trabajo, que si el piso, que si la pareja. Nos hemos vuelto muy exquisitos, antes aunque no se tuviera para comer una mujer traía al mundo como mínimo tres hijos, uno detrás de otro, antes de que los enormes blusones y los petos de don Pin-Pon que se llevaban entonces pasaran de moda. Eso era algo que era así, un pacto con la naturaleza tipo la Santa Alianza, más fuerte que cualquier cosa. Hablando de la vestimenta de las embarazadas, la barriga no se debía notar y para que no se notara existía la horrible ropa premamá que la hacía más voluminosa y ostentosa todavía y que hundía a la futura madre en la miseria erótica para los restos. Después de contemplarse y contemplarla con aquellas sayas, su imagen quedaba estigmatizada como madre de por vida. /upload/fotos/blogs_entradas/demi_moore_embarazada_en_vanity_fair_med.jpgTodo lo contrario que ahora en que no sólo se marca la tripa con prendas ajustadas, sino que se exhibe el color sonrosado del ombligo orgullosa y alegremente. Y quizá en este sentido habría que hacerle justicia al pionero desnudo de Demi Moore en estado de buena esperanza (como se decía antes) que desterró la idea de que mujer embarazada, mujer invisible. Ahora su invisibilidad tiene un origen diferente, es fruto de su escasa existencia con una repercusión social que parece que preocupa a los políticos, mientras que a nosotras nos da igual, y que la mujer inmigrante está paliando, de momento, hasta que se canse.

De hecho, si lo pienso, hace un siglo que no he tenido que cederle el asiento en el metro a ninguna embarazada. Y es que su presencia se ha convertido casi en una rareza. En el parque que hay junto a mi casa, por ejemplo, se ve algún que otro cochecito, pero nada como antaño en que ese espacio era de las niñeras y los retoños que cuidaban. Ahora las niñeras han tenido que reciclarse como acompañantes de ancianos, que es lo que más abunda. Por cierto, ¡vaya cochecitos!, qué ruedas, qué amortiguadores, qué capazos, qué capotas, y luego nos quejamos de que los hijos no quieran salir de casa, lo raro es que hayan querido salir del cochecito. Cuando llueve o hace frío se les blinda con una cubierta transparente tras la que observan a los que pasamos arriba y abajo con auténtica pena. Puede que cuando el increíble Pepe Isbert se encaprichó  del cochecito de paralítico en la película de Marco Ferreri, con el genial guión de Rafael Azcona, fuese una manera de volver a la infancia.

profile avatar

Clara Sánchez

Clara Sánchez es escritora española. En la actualidad reside en Madrid, donde estudió la carrera de Filología Hispánica y donde durante varios años enseñó en la universidad. Hasta la fecha ha publicado ocho novelas: Piedras preciosas (Debate, 1989), No es distinta la noche (Debate, 1990), El palacio varado (1993, Punto de Lectura 2006), Desde el mirador (Alfaguara, 1996), El misterio de todos los días (Alfaguara, 1999), Últimas noticias del Paraíso (Alfaguara, 2000), Desde el mirador (Alfaguara, 2004) y Presentimientos (2008).  Su obra ha sido traducida al francés, alemán, ruso, portugués, griego...Ha recibido el premio Alfaguara de novela en 2000 por Últimas noticias del paraíso. Y el premio Germán Sánchez Ruipérez al mejor artículo sobre Lectura publicado en 2006 por la columna titulada "Pasión Lectora" (El País, 6 de agosto). Colabora habitualmente en El País. Y durante unos cinco años lo hizo en el programa de cine de TVE "Qué grande es el cine".

Obras asociadas
Close Menu
El Boomeran(g)
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.