Clara Sánchez
Si eres joven y emprendedor, no esperes ni desesperes para que te den un empleo, créatelo tú. Incluso si no eres tan joven también puedes hacerlo. Los jubilados jóvenes ya se han cansado de pasarse la mañana en el parque y están montando asesorías y negocios en que sacar rentabilidad a su experiencia. El personal está más activo que nunca y de pronto quiere tomar las riendas de su vida, por eso cada vez se tiene menos tiempo de ser audiencia, de ir al cine, de leer, de aupar las series de televisión. Salvo los que ya no están en condiciones de salir de casa y ven Saber vivir y Cifras y Letras los demás invierten el tiempo en pensar cómo salir adelante, cómo tener energía para no dejarse derrumbar y cómo ingeniárselas para no permitir que las empresas decidan la vida de uno y partir de cero si hace falta.
La gente está a lo suyo, intentando abrirse hueco en el mercado. Por eso todo el mundo va hablando por el móvil, porque está abriéndose hueco. Por eso en el tren, en el avión, en un café, la gente está ensimismada en la pantalla de su ordenador. Está abriéndose hueco. Antes, o se caía de pie en el hueco o se lo abría uno a codazos, ahora hay otros métodos más sutiles, el mundo ofrece otros matices. Y cuando no estamos haciéndonos hueco, estamos en el gimnasio, hay que estar en forma para adaptarnos a los nuevos tiempos. La crisis es económica, ya hemos hablado de eso hasta la saciedad, pero la crisis también podría deberse (y digo podría porque no soy socióloga) a que la forma de vida ha cambiado y no hemos tenido más remedio que volvernos muy activos. La piscina de mi barrio está hasta los topes de ancianos que cuando terminan de nadar como fieras se van a sevillanas, clases de informática, a recoger a los nietos del colegio. Sobre todo, hay una señora que no sé cómo se las arregla para llegar hasta allí con las muletas.