Habitante del matorral mediterráneo y, en general, de zonas meridionales secas y calurosas, la curruca cabecinegra –Sylvia melanocephala- se ha establecido en puntos de la Canal de Berdún (término de Jaca, Huesca) en los que nunca había sido citada. Concretamente en laderas de monte bajo de la margen derecha del río Aragón entre las desembocaduras del Estarrún y el Lubierre, en la finca de Hortilluelo, pedanía de Ascara. En cuatro o cinco años esta especie termófila ha colonizado un ecosistema considerado no apto para ella. Si nos atenemos a la media de temperatura e innivación de los últimos cincuenta años nada haría sospechar que fuera posible la presencia del pájaro. ¿Qué está pasando?
