Iván Thays
Henry James
Henry James vivió con su familia en Nueva York entre 1848 y 1855 y, por consiguiente, muchos relatos de Henry James suceden en esa ciudad, que no era entonces la misma de ahora pero sí era una ciudad con tema. ?(?) los escritos de James revelan, por encima de todo, cierta ira, una ira que no se parece a ninguna otra en James, la que le provocaba todo lo que había perdido y todo lo que, en nombre del progreso, se había hecho en aquella ciudad que conocía tan bien? dice Colm Toibin, autor de una novela basada en Henry James, quien ha reunido algunos de esos cuentos en el libro antológico Nueva York (Sexto Piso) de casi 700 páginas. José María Guelbenzu hace la reseña para ?Babelia?.
Dice la reseña:
De entre los relatos del volumen destaca, naturalmente, una pequeña obra maestra,Washington Square, donde el lector que no la conozca podrá asistir a un drama miserable maravillosamente narrado y conocerá exactamente ese lugar de Nueva York que permaneció ?congelado? en el recuerdo del autor. Junto con él, el otro relato que se complementa a la perfección con éste en la medida que supone el reencuentro con el pasado es El lugar feliz (The jolly corner, también conocido como El rincón feliz), donde, bajo el velo de una historia de fantasma, se narra, utilizando como magnífico pretexto expresivo la figura del doble, el enfrentamiento de un hombre que regresa a rescatar su memoria del lugar perdido. Se basa en su tardío viaje a América en 1905 y es un soberbio ejemplo de relato de una lucha interior.
Éstas son las dos joyas del volumen que recogen por sí solas su sentido, pero hay más.La coherencia de Crawford, que no deja de recordar el tema de las conductas miserables, sucede en aquel viejo Nueva York y es inédito en español. Por el contrario,Un episodio internacional nos presenta a dos ingleses más bien cortos que no salen muy bien parados ante la animosa Miss Alden, pero su estancia en la ciudad es apenas relevante.
En cambio, Impresiones de una prima sí que da pistas sobre la actitud de James ante la ciudad. En fin, Nueva York se vuelve cada vez más inhóspita y desagradable y los relatos finales manifiestan aún más decididamente su rechazo. El libro cuenta una relación personal más que una ciudad, es cierto, pero dado que lo personal pertenece a James, me parece incuestionable su recomendación.