Clara Sánchez
Hay algo que no puedo soportar tanto de la llamada alta como de la baja cocina y es que los dedos de los cocineros y cocineras manoseen los alimentos más de lo debido. He comido los platos más exquisitos salidos de las manos de mi madre, que no era cocinera profesional pero que sabía hacer auténticas delicias, la he observado elaborando los platos horas y horas y jamás la vi toquetear tanto con los dedos como veo que hacen los grandes cocineros un hojaldre o lo que sea para quede muy bonito en el plato. De acuerdo que un cocinero constantemente se está lavando las manos o limpiándoselas con un paño, pero tampoco hay que olvidar que nuestra piel siempre está desprendiendo células muertas sin parar y que están las uñas, que por maravillosamente bien cepilladas que estén no deja de haber un hueco entre uñas y carne. Los cocineros se permiten hacer cosas que yo no hago en mi casa con las cosas que me voy a comer yo misma.