Vicente Luis Mora
XXVII
atravieso el puente breve sobre el río
mi mirada confunde su suelo frágil de troncos podridos
con el fondo del agua pasajera y del musgo
su distancia invisible tiembla ahora
álamos de delirio me circundan pálidos
lívida la mañana es el descanso que busco
con su desentrañarse con su tenaz murmullo
da el tiempo silencioso que arruina los alambres
[Antonio Méndez Rubio, El fin del mundo]
7
Mira el muro pintado por grafitis de protesta,
muros de todos y anónimo.
Y mira el agua.
Pasa el agua sin secretos en los ojos que la miran.
El agua hace que todo vuelva a entrar y salir, como mirar
dos veces y descubrir lo que antes no había visto,
cómo llega el amor a las cosas cuando ya te miran de lejos
y se quedan las palabras nunca dichas ni escritas.
[Francisco Gálvez, El oro fundido]
ÁLAMOS
Quien plantó allí esos álamos que veo
desde la carretera en la mañana
no pudo imaginarse
que alguien, yo, iba a mirarlos ya crecidos
-haciéndose entre todos tan buena compañía-
e iba a decir en un papel la gracia
con la que mueve el aire sus hojas en la luz.
[Eloy Sánchez Rosillo, Quién lo diría]
Se hace un signo afirmativo con el rostro
y se mira de un modo exento de categorías
donde yo soy tenuemente lo mirado y lo que,
si se invierten los cristales del prismático,
se descubre al fondo del horizonte perplejo,
tan cerca, tan vivo: una forma privada de atención.
[Esperanza López Parada, Las veces]
Esta tarde, frente a ti,
en los ojos siento algo
que te mira y no soy yo.
¡Qué antigua es esta mirada,
en mi presente mirando!
[Pedro Salinas, "Variación XIII"]
RESTOS DE FÁBULA / 3
el árbol cae en la luz
turbia lo vi caerse
al azar en la luz
de la desolación
[Antonio Méndez Rubio, Razón de más]
Nadie asusta al mar
Porque es verde y montañoso
Como unos ojos vistos
En lo que están mirando
[José Ángel Cilleruelo, El don impuro]
Mirar atrás,
aprovechar estos y otros azares para mirar atrás,
porque es la única dirección en la que se ve algo
digno de contarse.
[Mariano Peyrou, La voluntad de equilibrio]
La cosa ha ido hsta aquí de salir
de mí y de ver más plenamente, alzarme de esta
manera cara a cara ante mi auténtica postura.
Estar un paso a un lado y un paso hacia delante,
mirarme a mí mirando, percibirme percibiendo, escribirme ya escribiendo.
[Tadeusz Dąbrowski, Te Deum]
ESPEJO DE LA CONCENTRACIÓN
Las veces en que todo se reduce
a sólo lo que importa,
oigo un zumbido cerca pero lejos.
Las palabras
eligen camuflarse en los objetos
-de impronunciado corazón- y así
consiguen envolverme;
convertidas en quieta nebulosa,
muestran su espalda, denegadas, yermas.
Sólo tú, mente, prendes. Con gran gesto
de ardor embebecido manipulas
tu médula concisa.
Lo que te ha concentrado, esa entraña
que te lleva hacia sí, construye un cerco
con capas repetidas, con vitrales
deslucidos: el muro de palabras
que supiste acallar. Me asomaré.
Veré tu esfuerzo y me veré asomado.