Clara Sánchez
Muy pocas veces un premio millonario como el Planeta logra además el reconocimiento de un premio como el Nacional de Narrativa. No es nada fácil que se dé esta unanimidad, que los recelos que siempre levantan los galardones capaces de entregar al escritor lectores y dinero se desmoronen ante la calidad. Este pequeño milagro se ha producido hace unos días con la obra de Juan José Millás El mundo (Premio Planeta 2007, Premio Nacional de Narrativa 2008).
Me he alegrado mucho porque es justo reconocer a una de las voces más personales de nuestras letras. Más personales, más coherentes, más originales y que más se desvían de lo común. Millás ha logrado con sus geniales artículos y con sus cuentos y novelas que el lector normal y corriente se meta por las grietas de una realidad que de otra manera se le escaparía. Millás ha logrado rescatar para todos nosotros (me refiero a quienes escribimos) la curiosidad del lector. Y en los lectores ha logrado arrancar una agudeza que el lector ni siquiera sospechaba que tenía. De pronto, a través de la mirada de Millás, hemos aprendido a ver un poco más, como si nos hubiésemos puesto gafas de aumento.
Así que no sólo felicito a Millás, sino a ese "Mundo" que ha hecho posible que escriba.