
Ficha técnica
Título: Vidas breves | Autor: John Aubrey| Selección y traducción: Natalia Babarovic y Miriam Heard | Editorial: Ediciones UDP | Colección: Vidas ajenas | ISBN: 978-956-314-086-6 | Páginas: 227 | Precio de Referencia: $ 13.900 / USD 26,09
Vidas breves
John Aubrey
«John Aubrey en el siglo XVII veía a los hombres como los vería hoy el más ingenioso de los escritores. Los describía en frases breves, sin omitir ni añadir nada. Describía a todos aquellos sobre los que sabía algo, sin pretender encontrarlos buenos o malos». Elias Canetti
Escritor y pensador alemán
PRÓLOGO
NATALIA BABAROVIC
JOHN AUBREY nació en 1626 en Easton Piers, en Wiltshire, Inglaterra, y fue hijo de un terrateniente cuyos bienes, a su muerte, apenas alcanzaron para cubrir sus deudas. Esto fue sólo parte del destino funesto que la «ordenación de los planetas» designaba para Aubrey desde el día de su nacimiento. En el recuento que hace de su propia vida, incluido en este libro, comienza (en tercera persona) haciendo referencia a su mala estrella: «Su vida es más notable en el aspecto astrológico que por cualquier progreso en el campo del conocimiento, habiendo luchado desde su nacimiento (hasta hace poco) bajo el influjo de planetas malignos, por cuarenta años: escapadas de muchos peligros en viajes por tierra y por mar». Luego especifica la fecha, hora y año en que este destino se configuró: nació «el 12 de marzo (día de San Gregorio) del año de nuestro señor 1626, en horas cercanas al amanecer, siendo muy débil y a punto de morir, por lo que fue bautizado antes de la oración de la mañana».
Su percepción de la vida a la luz fatalista de la astrología adquiere cierta importancia si se considera que era uno de los hombres mejor informados sobre el estado del conocimiento en su época y con el rango de intereses más amplio, aunque tal vez no el más profundo. «Tenía la inteligencia necesaria para comprender el sistema de Newton», dice Lytton Strachey, «pero no la que haría falta para comprender que el horóscopo es un absurdo; de manera que en aquel cerebro parecido a una poblada almoneda, la astronomía y la astrología ocupaban un lugar propio, y tenían idéntico valor». Sin embargo, al leer las Vidas breves, su conciencia nos parece a menudo mucho más cercana a la nuestra que la de otros connotados de su época, como Milton o incluso Dryden.
Más tarde, la Guerra Civil, la enfermedad y muerte de su padre, las deudas y la constante falta de dinero impidieron que terminara sus estudios en Oxford y después en Londres. En otra ocasión, las objeciones de su madre entorpecieron sus planes de viajar a Italia que pudieron salvarlo de la ruina. Los juicios por la herencia de su padre y otro contra Joan Sumner, una mujer que cometió el error de cortejar, lo dejaron desposeído y lo obligaron a refugiarse de los alguaciles en las casas de sus amigos y conocidos.