
Ficha técnica
Título: Tres mujeres |Autor: Sylvia Plath |Ilustrador: Anuska Allepuz |Traductor: María Ramos |Editorial: Nórdica Libros |Tamaño: 13 x 19 cm |Encuadernación: Rústica |Páginas: 104 |ISBN: 978-84-15717-61-4 |PVP: 16,50 euros
Tres mujeres
Sylvia Plath
Sylvia Plath siempre apunta al corazón. Tres mujeres es un emocionante poema a tres voces que tiene como tema central la maternidad. Cada voz representa una forma de vivirla: la mujer que centra su realización en ser madre, la que sufre por no poder serlo y la que lo es a su pesar.
Sylvia concibió este poema, feminista y antibelicista, para ser leído en voz alta, y en 1962, un año antes de su muerte, lo leyó en la BBC. La experiencia supuso un cambio de dirección en su forma de afrontar la escritura. Desde entonces concebiría los poemas «en voz alta», cambiando de forma definitiva su técnica poética.
Booktrailer del libro «Tres mujeres», de Sylvia Plath
Setting:
A Maternity Ward and round about
Escenario:
Un hospital de maternidad y sus alrededores
FIRST VOICE
PRIMERA VOZ
I am slow as the world. I am very patient,
Turning through my time, the suns and stars
Regarding me with attention.
The moon’s concern is more personal:
She passes and repasses, luminous as a nurse.
Is she sorry for what will happen? I do not think so.
She is simply astonished at fertility.
When I walk out, I am a great event.
I do not have to think, or even rehearse.
What happens in me will happen without attention.
The pheasant stands on the hill;
He is arranging his brown feathers.
I cannot help smiling at what it is I know.
Leaves and petals attend me. I am ready.
Soy lenta como el mundo. Soy muy paciente,
girando a mi ritmo, los soles y las estrellas
me observan con atención.
El interés de la luna es más personal:
pasa y vuelve a pasar, luminosa como una enfermera.
¿Acaso se siente culpable por lo que va a suceder? Creo que no.
Simplemente le asombra tanta fertilidad.
Cuando salgo, soy un gran acontecimiento.
No tengo que pensar ni que prepararme.
Lo que suceda en mí sucederá por sí solo.
El faisán se yergue sobre la colina;
está ordenando sus plumas marrones.
No puedo evitar sonreír ante este conocimiento.
Pétalos y hojas me acompañan. Estoy lista.