Iván Thays
(?) también consideré que esto iba a ser posiblemente el principio de una siguiente situación en la que lo increíble se hace realidad. Y también me consideré a mí mismo como un elegido, veía que, si aquí en mi lugar estuviese otro, no vería nada, pero yo encontraba placer en lo que veía, incluso me había alegrado de ver tal desastre, que me provoca espanto, aquello era algo así como cuando un hombre teme al crimen y se guarda de la desgracia, pero cuando sucede algo en algún sitio, entonces el que pueda va y mira y se queda mirando fijamente el hacha en la cabeza, la ancianita aplastada por el tranvía, sólo que ahora yo iba y no corría tal como suelen salir corriendo del lugar de contemplación de la desgracia las demás personas, yo estaba contento de que las cosas estuvieran así, incluso averigüé y sufrimiento, que esta monstruosidad son poco para mí, que podría caer no solo sobre mí, sino sobre el mundo entero cosas peores?
Bohumil Hrabal, Yo que he servido al rey de Inglaterra