
Ficha técnica
Título: La senectud del capitalismo | Autor: Lluís Boada | Editorial: Economía Digital Libros | Colección: ED Libros | Encuadernación: Fresada | Formato: Tapa blanda | Fecha: feb-2017 | Páginas: 200 | ISBN: 978-84-617-7219-3 | Precio: 18,50 euros
La senectud del capitalismo
Lluís Boada
De forma directa y sugestiva, el autor se dirige a los jóvenes, aunque nos interpela a todos, para explicarles la economía como algo inseparable de las humanidades y desentrañar las contradicciones de un sistema capitalista que da señales palpables de agotamiento. En efecto, el capitalismo encierra en su interior una paradoja trágica: ser el único sistema validado como efectivo en la sociedad moderna y, al mismo tiempo, ser el causante de un deterioro moral, medioambiental, económico, político y cultural que lo conducen a su colapso final.
Lluís Boada cree en la economía como una ciencia social, que no puede quedar disociada de la experiencia humana más vital, de su propio cuerpo físico. Boada explica en La Senectud del capitalismo cómo puede la juventud conseguir unas relaciones económicas más acordes con las necesidades humanas y sin violentar el medio ambiente.
DE LA SABIDURÍA
Fachada del nacimiento
Te escribo teniendo ante mis ojos el templo expiatorio de la Sagrada Familia. Evoco esta circunstancia no solo para situar el lugar que he elegido para escribir, sino porque, dada la lógica preocupación por la economía que se respira en el ambiente y que parece enturbiar tu horizonte vital, el templo de Gaudí plantea cuestiones muy interesantes a elucidar.
En los primeros años de construcción fue llamada «la catedral de los pobres». Entonces Joaquim Mir pintó un cuadro al que dio este título. Es un templo que se ha ido construyendo gracias a la generosidad piadosa que innumerables y anónimos ciudadanos de este país practicaron durante décadas. Así pudo construirse la fachada del Nacimiento con sus torres asombrosas, erigiéndose en un atractivo de fuerza universal. Desde hace años, millones de visitantes de todo el mundo vienen aportando el dinero suficiente para que la construcción haya seguido un ritmo acelerado y sea posible fijar una fecha aproximada para la finalización de una obra que había adquirido el estatuto de obra interminable.
Así, pues, un templo expiatorio, modestamente financiado, pero engrandecido por el genio de Gaudí, además de cumplir una función religiosa, espiritual y estética, se ha convertido en un importantísimo captador de dinero. En primer lugar, para su propia financiación mediante las entradas vendidas. Y, en segundo lugar, para la ciudad y el país entero pues, atraídas por él, verdaderas multitudes visitan otros edificios y museos, se alojan en hoteles, comen en restaurantes, utilizan los medios de transporte, hacen compras y se entremezclan con la gente en las calles dando un aire cosmopolita a Barcelona.